La periodista Ivonne Toro proporcionó este lunes detalles de su investigación sobre Hugo Bustamante, el asesino de Ámbar Cornejo, en el marco de la escritura de su libro “La niña Ámbar”, para lo cual también entrevistó a la madre de la adolescente, Denisse Llanos.
Ivonne Toro actualmente es periodista de Ciper Chile y también trabajó en la sección de política del diario La Nación impreso.
En una conversación con Radio ADN, la profesional contó que Bustamante confesó crímenes cometidos en 1996.
En el transcurso de la entrevista, Toro explicó cómo llegó a la conclusión de que Bustamante encajaba con el perfil de un psicópata típico.
“Durante las entrevistas con Bustamante, basada en manuales de psicópatas y entrevistas con psiquiatras, llegué a la conclusión de que su perfil coincidía con el de un psicópata tradicional. Le pregunté abiertamente si había matado a más personas y él respondió que no había pruebas, lo cual fue una respuesta muy extraña. Las conversaciones continuaron y, en algún momento, me dio dos nombres incompletos. Fue un proceso largo llegar a la convicción de que esas personas existían, que habían estado desaparecidas y que estaban vinculadas con Bustamante”, relató Toro.
Además, reveló que Bustamante proporcionó nombres incompletos de sus víctimas, los cuales Toro investigó y logró corroborar lo peor: La familia de Hinojosa y Páez confirmó que ambos estaban desaparecidos desde 1996. “Me dice, ‘le tengo un regalo sobre su pregunta’ me da estos dos nombres, que son de manera incompleta (…) Yo le decía que sabía que los cuerpos estaban en Covadonga 641. Al principio trató de negarlo, pero finalmente lo admitió”, afirmó.
“No pasó nada desde 1996 hasta la confesión. En la antigua justicia, esto no quedó registrado en los antecedentes de Hugo. Cuando fue detenido en 2005 por los homicidios de Verónica y ‘Kenito’, esto no aparecía. Lo mismo en 2020. La fiscalía no falló; simplemente había un vacío en el registro de 1996″, criticó Toro a la policía y los organismos del estado que llevaron el crimen que confesó Bustamante.
Al descubrir que Ámbar era la quinta víctima de Bustamante, Toro describió la sensación como muy angustiante: “Decidimos mantener la información encapsulada hasta poder acercarnos lo más posible a la verdad. Hablé con la familia de las víctimas y tomamos la decisión de abrir esto solo cuando tuviéramos suficientes respuestas”, explicó.
“En ese momento, él escribió algo parecido a: ‘me descolocaste, por vez primera algo parecido a la conciencia ha surgido en mí’”, dijo.
ASÍ CONFESÓ HUGO BUSTAMANTE
Ivonne Toro ha estado investigando durante cuatro años las fallas del Estado que permitieron que los caminos de Ámbar Cornejo y Hugo Bustamante se cruzaran. Toro descubrió que Bustamante, además de asesinar a Ámbar Cornejo, también habría matado a una madre y su hijo en 1996, sumadas a Verónica Vásquez y su hijo de 9 años, Eugenio Honorato, que fue encontrado al interior de un tambor en 2005.
La revelación de estos crímenes adicionales comenzó con una serie de entrevistas que la periodista realizó a Bustamante para su libro “La niña Ámbar”. Durante estas entrevistas, Bustamante confesó haber asesinado a Elena Hinojosa y Eduardo Páez, madre e hijo desaparecidos desde 1996.
Toro detalló que la confesión de Bustamante fue obtenida después que él finalmente respondió a la pregunta sobre si había matado a más personas. “Él calza con todo el perfil de lo que yo leí, de lo que es un psicópata de manual. Solo no me calza que el primer homicidio es el de Eugenio y Verónica cuando él tenía 40 años. Y frente a eso nace la inquietud mía. Le digo a quemarropa: ‘¿Has matado a más personas?’, y me responde: ‘En ninguna parte sale eso’. Y esa no es una respuesta normal”, explicó.
Luego, Bustamante entregó los nombres incompletos de sus víctimas, los cuales Toro investigó y logró corroborar lo peor: La familia de Hinojosa y Páez confirmó que ambos estaban desaparecidos desde 1996.
“Me dice, ‘le tengo un regalo sobre su pregunta’ me da estos dos nombres, que son de manera incompleta”, afirmó.