La vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, se reunió este viernes en La Moneda con la disidente cubana Rosa María Payá, hija del fallecido político opositor del castrismo, Oswaldo Payá. Ambas llamaron a la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, a “ejercer su liderazgo” en Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Tras el encuentro, la ministra expresó que “nosotros compartimos el anhelo por avanzar en materia de derechos políticos y de derechos humanos del pueblo cubano y la esperanza que ojalá, no en el largo tiempo, el pueblo cubano pueda vivir en una democracia plena”.
“Nosotros, como Gobierno, vamos a seguir con mucha fuerza levantando la voz porque en toda la región y también en el mundo exista una valoración a la democracia y exista el respeto por los derechos humanos, exista libertad de información, de prensa, de derechos políticos y el Presidente lo ha hecho en innumerables ocasiones con Cuba, con Venezuela y también con Nicaragua”, añadió.
“Tenemos convicción que la defensa de los derechos humanos no tiene fronteras, no tiene ideología política, finalmente es un valor que tiene que convocar a todos los demócratas, y en ese sentido, la alta comisionada de Derechos Humanos tiene la responsabilidad de ejercer su liderazgo democrático”, aseveró.
Para eso, le pidió abordar “la protección, la valoración de los derechos humanos y las plenas garantías democráticas en todos los países y en especial en aquellos que hoy día viven frente a una dictadura o un régimen totalitario”.
A su vez, María Rosa Payá declaró que “Bachelet tiene ahora la oportunidad de ser coherente con la defensa de los derechos humanos en la región y de también asumir y abordar el tema del castrismo como un ente desestabilizador de la democracia en la región”.
También acusó al castrismo como el “responsable directo por crímenes de lesa humanidad dentro de la isla por violaciones flagrantes de derechos humanos como es el asesinato de mi padre hace seis años en una carretera de Cuba y como es también la prisión política de más de 120 personas”.
“Tenemos convicción que la defensa de los derechos humanos no tiene fronteras, no tiene ideología política, finalmente es un valor que tiene que convocar a todos los demócratas, y en ese sentido, la alta comisionada de Derechos Humanos tiene la responsabilidad de ejercer su liderazgo democrático”, aseveró.
Para eso, le pidió abordar “la protección, la valoración de los derechos humanos y las plenas garantías democráticas en todos los países y en especial en aquellos que hoy día viven frente a una dictadura o un régimen totalitario”.
A su vez, María Rosa Payá declaró que “Bachelet tiene ahora la oportunidad de ser coherente con la defensa de los derechos humanos en la región y de también asumir y abordar el tema del castrismo como un ente desestabilizador de la democracia en la región”.
También acusó al castrismo como el “responsable directo por crímenes de lesa humanidad dentro de la isla por violaciones flagrantes de derechos humanos como es el asesinato de mi padre hace seis años en una carretera de Cuba y como es también la prisión política de más de 120 personas”.