En el medio nacional, nadie quedó ajeno a la paupérrima actuación que tuvo la selección chilena este martes en Barranquilla. La Roja demostró poco y nada de la leve alza futbolística experimentada ante Brasil, perdiendo por un holgado 4-0 frente a Colombia.
Uno de los que siguió atento la actuación de Chile fue el volante de Colo Colo, Arturo Vidal, quien volvió a hacerse presente con una transmisión para su canal de Kick, esta vez junto a sus compañeros del Cacique, Leonardo Gil y Carlos Palacios, jugador que está en el centro de la polémica tras haber solicitado su liberación de la nómina por “problemas personales”.
En la transmisión, el “King” vivió un verdadero minuto de furia cuando el reloj marcó el 34′, momento en que Davinson Sánchez aprovechó el pivoteo de un compañero para convertir el 1-0.
“¡Si les dije que las pelotas paradas, se los dije a estos cu…, lo dije que los centrales, a esos hu… no hay que dejarlos que se acerquen al área. Me duele el alma, me duele todo. Lo celebra el delincuente, si le pego en la cabeza, que suerte ese gol”, dijo visiblemente molesto el bicampeón de América.
Asimismo, el ex Barcelona expresó su enojo porque los dirigidos por Ricardo Gareca arriesgaban mucho la salida al jugar en corto. “¡Pero hu…, no puede ser! Está bien (jugar) corto, pero cuando ves que ya no hay espacio, tírala a la mierda y más en esa cancha donde siempre te da un bote cu…”, señaló.
Una vez concluido el partido, el histórico mediocampista, quien se había restado del proceso de Gareca, sorprendió a todos al asegurar que “yo todavía me tengo fe que si vuelvo, y vuelven algunos, todavía podemos pelear”.
“Matemáticamente no estamos eliminados, hay buenos cabros chicos, si los que juegan son buenos. Jugadores que seguramente les falta madurar un poquito, pero tienen buena calidad, técnicamente son buenos. Me gustaría hablar con un entrenador, para entender lo que pasa. Uno como jugador dice lo que piensa”, complementó.
Por último, Vidal utilizó a una de las figuras de la “Tricolor” para responder a algunos cuestionamientos recibidos. “Eso es lo que molesta acá en Chile, cuando dicen ‘ya están grandes’. Mira a James cómo juega, tranquilamente trotando. Toca y se mueve, y cuando la tiene te la da como con la mano. Él no necesita correr ni acelerar, necesita tener la pelota y hace jugar a los demás”, cerró.
