Luego de la promulgación de la ley de imprescriptibilidad de delitos sexuales contra menores, James Hamilton, una de las víctimas denunciantes de Fernando Karadima, valoró el trabajo legislativo que se realizó para convertir la moción en ley.
Tras participar de la ceremonia de promulgación de la ley en La Moneda, Hamilton señaló que está “extremadamente feliz por todo, uno estas cosas no las hace solo, las hace porque tiene un apoyo y pudo repararse y eso se debe principalmente a mi señora, a mis hijos, a los amigos, pero principalmente porque uno tiene un lugar donde puede pararse de nuevo para seguir adelante”.
“Este es un trabajo de todo Chile, del Congreso, de los senadores, un impulso del Presidente, del ministro de Segpres (Gonzalo Blumel), así es como uno quisiera ver a Chile, trabajando todos juntos de una forma transversal que hoy día claramente ya no son los temas de ideología, sino que son temas de necesidades y de alguna manera de un vivir en común de más armonía y más justicia”, añadió el doctor.
En esa línea, Hamilton recalcó que de todas formas “hay muchas cosas pendientes, cambiar la mentalidad por el tema retroactividad es un tema pendiente, el senador Huenchumilla (DC) ha iniciado unas propuestas de ley sobre la Constitución, hay mucho que trabajar, este es el principio y espero que todos nos ayuden. Cuando se trata de infancia, de justicia y de verdad lo único que hay son capítulos abiertos”.
A su vez, José Andrés Murillo, otro de los denunciantes de Karadima, aseguró que “esta es una ley tremendamente importante que nos pone al día en el derecho que tienen todas las personas, sobre todo las víctimas que han sufrido durante mucho tiempo la carga del silencio, la carga de la impunidad de las personas que lo han vulnerado y que por el paso del tiempo no han podido ejercer su derecho”.
“En este momento, el abuso sexual infantil es imprescriptible, nosotros sí nos habría gustado que fuera retroactivo, pero este es un paso importante para Chile y nos pone en la punta de los países que están luchando contra el abuso sexual infantil”, concluyó Murillo.
Tras participar de la ceremonia de promulgación de la ley en La Moneda, Hamilton señaló que está “extremadamente feliz por todo, uno estas cosas no las hace solo, las hace porque tiene un apoyo y pudo repararse y eso se debe principalmente a mi señora, a mis hijos, a los amigos, pero principalmente porque uno tiene un lugar donde puede pararse de nuevo para seguir adelante”.
“Este es un trabajo de todo Chile, del Congreso, de los senadores, un impulso del Presidente, del ministro de Segpres (Gonzalo Blumel), así es como uno quisiera ver a Chile, trabajando todos juntos de una forma transversal que hoy día claramente ya no son los temas de ideología, sino que son temas de necesidades y de alguna manera de un vivir en común de más armonía y más justicia”, añadió el doctor.
En esa línea, Hamilton recalcó que de todas formas “hay muchas cosas pendientes, cambiar la mentalidad por el tema retroactividad es un tema pendiente, el senador Huenchumilla (DC) ha iniciado unas propuestas de ley sobre la Constitución, hay mucho que trabajar, este es el principio y espero que todos nos ayuden. Cuando se trata de infancia, de justicia y de verdad lo único que hay son capítulos abiertos”.
A su vez, José Andrés Murillo, otro de los denunciantes de Karadima, aseguró que “esta es una ley tremendamente importante que nos pone al día en el derecho que tienen todas las personas, sobre todo las víctimas que han sufrido durante mucho tiempo la carga del silencio, la carga de la impunidad de las personas que lo han vulnerado y que por el paso del tiempo no han podido ejercer su derecho”.
“En este momento, el abuso sexual infantil es imprescriptible, nosotros sí nos habría gustado que fuera retroactivo, pero este es un paso importante para Chile y nos pone en la punta de los países que están luchando contra el abuso sexual infantil”, concluyó Murillo.
