Hope Hicks renunció a su cargo como directora de comunicaciones de la Casa Blanca. La dimisión se da a conocer al día siguiente que la una de las asistentes más cercanas del presidente estadounidense, Donald Trump, compareciera ante una comisión investigadora del Congreso como parte de las injerencias de la conocida “trama rusa”.
La ahora exmiembro del gabinete, compareció el martes en una audiencia a puerta cerrada en el Congreso sobre la posible injerencia rusa en las elecciones, pero se negó a responder muchas de las preguntas del Comité de Inteligencia.
La directora de comunicación de la Casa Blanca, de 29 años de edad, se limitó a contestar las preguntas aprobadas anteriormente, según los miembros del comité, al igual que ya han hecho otros consejeros del círculo de Trump que han comparecido, como el exjefe de estrategia de la Casa Blanca Steve Bannon.
Hicks evitó preguntas sobre su trabajo y los contactos de la Casa Blanca con Rusia después de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre de 2016 y de la toma de posesión del 20 de enero de 2017, según el congresista demócrata Mike Quigley.
“Están siguiendo las órdenes de la Casa Blanca de no contestar ciertas preguntas“, aseguró Quigley a los periodistas.
El comité ha realizado varias audiencias sobre la posible interferencia rusa en las elecciones y los vínculos entre la campaña de Trump y Moscú, pero no ha conseguido grandes avances debido a la lucha entre los republicanos leales al presidente y los demócratas que presionan a la Casa Blanca.
