El Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de Santiago sentenció a Gerardo Leal Robles a 10 años de prisión, siendo el único acusado por el incendio de la Iglesia San Francisco de Borja en la comuna de Santiago el 3 de enero de 2020, en el contexto del estallido social.

Específicamente, se le impusieron penas de cuatro y seis años de presidio efectivo, como autor de los delitos consumados de porte de artefacto incendiario e incendio de la también conocida como Iglesia de Carabineros.

Por estos delitos, la Fiscalía había solicitado penas de siete años de presidio por uno de los ilícitos y cinco años por el otro.

El fiscal José Morales, de la Fiscalía Regional Centro Norte, indicó que “en este caso, se trata de una investigación que efectuó el OS9 de Carabineros en conjunto con el Labocar de esa institución, lo cual permitió, con las pruebas aportadas y con los antecedentes, testimonios, que el tribunal condenara a este imputado a la pena de seis años por el incendio de la iglesia y cuatro años por los lanzamientos de las bombas molotov”.

El persecutor detalló que los lanzamientos “se realizaron contra los carabineros que estaban custodiando el orden público en ese día de graves disturbios en la ciudad de Santiago”.

Según la investigación de la Fiscalía, el 3 de enero de 2020, alrededor de las 20:30 horas, el acusado ingresó al recinto religioso y arrojó, al menos en dos ocasiones, líquido acelerante a una alfombra y a un mueble de madera, prendiéndolos con un encendedor, lo que propagó el fuego y desencadenó el incendio.

Leal Robles fue detenido el mismo día del hecho y posteriormente quedó en prisión preventiva hasta el 28 de agosto de 2021, cuando el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago modificó su medida cautelar a arresto domiciliario total. Luego, el sujeto dejó de ser ubicable, siendo finalmente detenido en junio de 2023.