Para igual período, la tasa de ocupación informal femenina se sitúo en 30,5% y la masculina en 28,1%. Trimestralmente, los ocupados informales descendieron 3,3% como consecuencia de la reducción en las mujeres (-5,3%) y en los hombres (-1,7%), y de la disminución de 9,0% en el tramo 25-34 años.
Sectorialmente, las mayores se consignaron en los ítems Hogares como Empleadores (51,3%) y Otras actividades de Servicios (47,0%), mientras que el descenso de los ocupados informales (-3,3%) fue incidido por Comercio (-6,2%), Enseñanza (-33,4%) y Servicios Administrativos y de Apoyo (-14,8%).
Según categoría ocupacional, Trabajadores por Cuenta Propia y Servicio Doméstico Remunerado alcanzaron las mayores Tasas de Ocupación Informal del período con 65,1% y 49,8%, en cada caso. Por su parte, la contracción de los Ocupados Informales fue incidida por Trabajadores por Cuenta Propia (-3,5%) y Asalariados Públicos (-17,3%).
Por sexo, la principal incidencia en el decrecimiento de las mujeres ocupadas informales se dio en Trabajadoras por Cuenta propia (-11,4%). En tanto, en los hombres la disminución fue consecuencia de Asalariados Privados (-3,1%).
Los Trabajadores por Cuenta Propia Informales se configuraron como la categoría que más contribuyó a la presencia de informalidad dentro del mercado laboral, agrupando 47,6% del total de ocupados informales del período.
En términos estructurales, cuatro sectores agrupan al 66,3% de los trabajadores por cuenta propia informales: Comercio (23,3%), Agricultura y Pesca (16,9%), Construcción (14,4%) e Industrias Manufactureras (11,7%).
Por región, La Araucanía (38,1%), Los Ríos (36,9%) y Tarapacá (36,1%) registraron las mayores tasas de ocupación informal del trimestre.