Un violento asalto armado afectó este viernes a la empresa Brinks, en Rancagua, dedicada al transporte de valores.
Según consignó Radio Cooperativa, el hecho delató desde un primer momento una compleja planificación, pues al menos cuatro vehículos -entre automóviles y camiones- fueron quemados en las inmediaciones, con el eventual objetivo de confundir a las policías y favorecer la huida de los delincuentes.
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve , dijo desde La Moneda que al menos siete personas fueron detenidas.
Indicó que la quema de vehículos fue un “mecanismo de distracción”; y calificó la acción delictual como “un hecho gravísimo, que ocurre en un sector urbano” e involucró uso de armas de fuego.
Registros difundidos en redes sociales muestran a los ladrones vestidos de negro y lanzando bolsas de dinero desde las dependencias de Brinks hacia el exterior. Lo hicieron tras haber ingresado al recinto mediante una escalera, y en medio de la incredulidad de algunas trabajadoras, que incluso especularon respecto a un posible “simulacro” de robo.
Monsalve detalló que la reacción “oportuna, legítima y profesional” de Carabineros logró repeler el crimen y frustrar la huida, sin que se registraran uniformados ni civiles inocentes heridos.
Dos de los antisociales resultaron lesionados a bala, y uno de ellos se encuentra en riesgo vital.
El operativo policial continúa, a esta hora, en distintos sectores de la capital regional de O’Higgins, y la policía ya incautó a los detenidos un fusil de guerra, cuatro pistolas y una granada de humo.
De momento no hay estimación oficial respecto al botín que habían conseguido los ladrones.