La autoridad comunal porteña señaló a radio ADN que “los bienes públicos, como una camioneta municipal, no se pueden ocupar para poder hacer un baile en horas de trabajo. Son bienes que le pertenecen a la comuna”.
Por ello, sentenció, “me parece que eso es lo que tiene que primar, los bienes públicos deben satisfacer necesidades públicas, y no necesidades privadas ni tampoco el culto a la figura de alguien en particular, sea quien sea”.