Se trata del primer lanzamiento de teléfono inteligente del gigante surcoreano tras la humillante retirada planetaria de su Galaxy Note 7, cuya producción fue parada en el otoño boreal pasado debido a riesgos de explosión.
Samsung Electronics sale apenas de una de las peores secuencias de su historia tras el encarcelamiento de su vicepresidente Lee Jae-Yong, también heredero del grupo, y de otros directivos, por su implicación en el escándalo de corrupción que provocó la destitución de la expresidenta del país, Park Geun-Hye.
El Galaxy S8, que ya fue presentado a finales de marzo en Nueva York, fue muy bien acogido por los especialistas.
En Corea del Sur, ya hay pedidos para más de un millón de ejemplares del S8 y del S8+, un poco más grande.
SUBEN LAS ACCIONES DE LA EMPRESA
Este viernes, la acción de Samsung Electronics ganó un 1,2% en la Bolsa de Seúl. “La reacción de los mercados al lanzamiento de la serie S8 es más bien positiva” declaró Lee Seung-Woo, de IBK Investment Securities.Los pedidos anticipados ya se iniciaron esta semana y el S8 estará disponible en las tiendas a partir de este viernes en Estados Unidos y Canadá. El aparato será lanzado la próxima semana en más de 50 países.
Samsung Electronics es el buque insignia del grupo Samsung, que contribuye en un 20% al PIB de Corea del Sur.
Samsung Electronics cedió por poco el primer lugar mundial a Apple en el mercado de los smartphones en el cuarto trimestre de 2016. También se enfrenta a una feroz competencia del chino Huawei.
Pese a ello, el grupo espera obtener un beneficio en alza de 50% en el primer trimestre de 2017, hasta los 9,9 billones de wons (8.700 millones de dólares), el segundo mejor resultado de este tipo jamás publicado por Samsung en un trimestre.