Después de la denuncia, Romer debió aclarar que no había sido su intención dar a entender que el informe fue manipulado para perjudicar la evaluación del gobierno. Además, el Banco Mundial no respaldó sus dichos.
Jim Yong Kim, presidente del organismo, informó que Romer renunció a su cargo de forma inmediata, para volver al cuerpo académico de una universidad.
“Aprecié la franqueza y honestidad de Paul y sé que lamenta las circunstancias de su partida”, dijo Jim Yong Kim.