El deterioro en la infraestructura de una antigua comisaría en Nueva Orleans, Estados Unidos, ha permitido el acceso de diferentes especies a su interior, entre ellas ratas, quienes han festinado comiéndose la marihuana incautada como evidencia.
La superintendente de policía, Anne Kirkpatrick, señaló a los miembros del Consejo Municipal de la ciudad del estado de Luisiana que “las ratas se están comiendo nuestra marihuana, están todas drogadas”, según recogió L.A. Times, donde aseguró que se vienen colando en la comisaría desde 1968.
Sobre la labor de los empleados del aseo encargados de limpiar el lugar, Kirkpatrick comentó que “se merecen un premio por intentar limpiar lo que no se puede limpiar”, puesto que “la suciedad es fuera de serie”.
En base a su propia experiencia, el expolicía Kenny Guidry rememoró que a veces debía estar “a las 6:30 de la mañana, y cuando entraba en mi despacho encendíamos la luz y había que darles unos 25 o 30 segundos porque veías a las ratas revolverse”.
De hecho, añadió que en reiteradas ocasiones han encontrado heces en los escritorios de los más de 900 funcionarios de policía.
