En un acto que ya habían hecho en otros conciertos realizados en otras ciudades europeas, los guitarristas Paul Landers y Richard Kruspe se dieron un beso en la boca al momento en que la banda estaba interpretando la canción “Auslander”, hecho que el mismo grupo destacó a través de fotografías publicadas en su cuenta oficial de Instagram.
https://www.instagram.com/p/B0jJQnBgy0K/?utm_source=ig_web_copy_link Con este acto desafiaron la polémica normativa rusa promulgada por Vladimir Putin en 2013, que arresta y multa a las personas que manifiesten un comportamiento que promueva la homosexualidad.
Los músicos arriesgaron ser detenidos y multados con el pago de 5 mil rublos.