El Presidente Sebastián Piñera anunció este viernes que el Gobierno pretende derogar cien leyes que se encuentran “obsoletas”, con el fin de avanzar en una revolución microeconómica y llamó a destrabar proyectos por US$65 mil millones.
El Mandatario indicó que presentará un proyecto que anulará estas leyes, las que no están operativas y que se encuentran “tácitamente derogadas”, pero que obstaculizan el desempeño de las empresas en Chile.
Esta medida irá acompañada de un instructivo presidencial que obligue a los ministerios y organismos del Estado a revisar y evaluar periódicamente, las normas y reglamentos.
El Mandatario señaló que cada iniciativa legal debe ser evaluada sobre qué efecto tendrá sobre la economía.
“Muchas veces se aprueban normas que nadie ha medido siquiera el efecto o el impacto que puede tener sobre la economía y esa información, tal vez, si la tuvieran los legisladores, hubieran legislado de otra manera”, dijo el Presidente.
El Jefe de Estado destacó la importancia de potenciar la oficina de Gestión de Proyectos Sustentables (GPS), la que está enfocada en coordinar a inversionistas para guiar y facilitar procesos que deben enfrentar los proyectos.
Misma tarea tiene la Oficina de Productividad y Emprendimiento Nacional (OPEN) que busca simplificar trámites, eliminar la burocracia e incorporar a las pymes a la economía moderna, explicó el Presidente.
“Nos pusimos como un objetivo central recuperar el liderazgo, el dinamismo y esa sana ambición que habíamos perdido (…) Ésta es una tarea que no se agota ni en un día, ni en un año, ni en un gobierno, pero sí creo que estamos avanzando en la dirección correcta”, destacó.
A su vez, el ministro de Economía, José Ramón Valente, recalcó que lo que se quiere es despertar esa sana ambición para lograr algo grande y noble.
El Mandatario indicó que presentará un proyecto que anulará estas leyes, las que no están operativas y que se encuentran “tácitamente derogadas”, pero que obstaculizan el desempeño de las empresas en Chile.
Esta medida irá acompañada de un instructivo presidencial que obligue a los ministerios y organismos del Estado a revisar y evaluar periódicamente, las normas y reglamentos.
El Mandatario señaló que cada iniciativa legal debe ser evaluada sobre qué efecto tendrá sobre la economía.
“Muchas veces se aprueban normas que nadie ha medido siquiera el efecto o el impacto que puede tener sobre la economía y esa información, tal vez, si la tuvieran los legisladores, hubieran legislado de otra manera”, dijo el Presidente.
El Jefe de Estado destacó la importancia de potenciar la oficina de Gestión de Proyectos Sustentables (GPS), la que está enfocada en coordinar a inversionistas para guiar y facilitar procesos que deben enfrentar los proyectos.
Misma tarea tiene la Oficina de Productividad y Emprendimiento Nacional (OPEN) que busca simplificar trámites, eliminar la burocracia e incorporar a las pymes a la economía moderna, explicó el Presidente.
“Nos pusimos como un objetivo central recuperar el liderazgo, el dinamismo y esa sana ambición que habíamos perdido (…) Ésta es una tarea que no se agota ni en un día, ni en un año, ni en un gobierno, pero sí creo que estamos avanzando en la dirección correcta”, destacó.
A su vez, el ministro de Economía, José Ramón Valente, recalcó que lo que se quiere es despertar esa sana ambición para lograr algo grande y noble.