Autoridades de Portland declararon estado de emergencia con una duración de 90 días para frenar el uso e impacto del fentanilo. El pasado martes, altos funcionarios estatales y municipales indicaron que el uso tolerado de estupefacientes está dañando a la ciudad, que ha ido en decadencia durante los últimos años.
Según informó la BBC, el número de muertes por sobredosis relacionadas con el fentanilo aumentó en un 533% entre 2018 y 2022. Por ello, la gobernadora de Oregon, Tina Kotek, anunció el estado de emergencia y declaró que la ciudad ha sufrido un “daño económico y reputacional” producto del fentanilo.
“Nuestro país y nuestro estado nunca han visto una droga tan mortalmente adictiva, y todos estamos luchando por encontrar una respuesta”, indicó mediante un comunicado. En compañía del alcalde de Portland, Ted Wheeler, junto con la presidenta del condado de Multnomah, Jessica Vega Pederson, Kotek anunció una nueva acción “tri-gubernamental” para frenar la crisis.
Según el citado medio, la orden establece un “centro de mando” temporal, en donde los “empleados estatales, del condado y de la ciudad se reunirán para coordinar las estrategias y los esfuerzos de respuesta”, señalaron mediante una declaración conjunta.
Asimismo, el plan contempla que el Departamento de Salud inicie una campaña en vallas publicitarias, transporte público y en internet, con la intención de promover la prevención y el tratamiento de la drogadicción.
“Los próximos 90 días darán lugar a una colaboración sin precedentes y a recursos enfocados en el fentanilo, y proporcionarán una hoja de ruta para los próximos pasos”, añadió Kotek.
