El Presidente Sebastián Piñera promulgó este vierne, en Punta Arenas, la ley que crea el Estatuto Chileno Antártico, como una forma de reforzar la soberanía del país en ese continente, a través de una estructura jurídica y administrativa.

Junto al Mandatario estuvieron en el acto, junto al estrecho de Magallanes y a bordo del patrullero “Marinero Fuentealba”, los ministros de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand y de Ciencia, Andres Couve; el subsecretario de Defensa, Cristián de la Maza; el intendente de Magallanes, José Fernández y el alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich.

El proyecto fue presentado a fines del primer mandato de Piñera y la tramitación se retomó en este segundo período, siendo despachado a ley hace algunas semanas por el Congreso, en medio del anuncio de Argentina de aumentar su plataforma antártica más allá de las 200 millas, una pretensión que genera un diferendo con Chile y también con Gran Bretaña.

“Hoy estamos dando un paso importante para fortalecer, proteger y resguardar con mayor eficacia la vocación, el destino que acompaña a Chile desde su nacimiento. Así reafirmamos nuestros derechos y nuestra soberanía sobre el continente blanco, promulgando el Estatuto Antártico”, expresó el Presidente.

Piñera agregó que “Chile tiene poderosas razones para sostener sus derechos y su presencia en el continente antártico, de carácter históricas, desde los tiempos de la colonia, de carácter jurídicos y también geográficos”.

Sobre el estatuto, el Jefe de Estado precisó que “es una ley marco que sistematiza, coordina y moderniza las normas y las instituciones a través de las cuales se regula la presencia y la relación de nuestro país que antes se encontraban dispersas en múltiples cuerpos legales desactualizados y desarticulados. Eso nos obligó a establecer un solo estatuto antártico”.

“Este estatuto -puntualizó- se adapta no solo a las necesidades presentes, sino que también a las futuras, protegiendo y fortaleciendo nuestros derechos soberanos, y al mismo tiempo incluyendo la plataforma continental con claros fundamentos geográficos, históricos y jurídicos”.

Según remarcó, el estatuto asume todas las obligaciones internacionales que Chile ha aceptado al ser parte del Tratado Antártico de 1959, del cual el país es uno de los fundadores.

“Esto significa que Chile se mantendrá muy firme en la postura asumida desde el primer día, de ser un garante del continente blanco, como un continente de la paz. Eso significa, impedir su nuclearización, promover la investigación y el desarrollo científico y tecnológico, fortalecer la preservación del medio ambiente, de la flora y de la fauna, y proteger los recursos naturales de este continente, con la presencia de nuestros órganos jurídicos y administrativos en ese territorio”, expresó.

“Para el Gobierno -añadió-, la importancia estratégica que tiene la Antártica para Chile hace necesaria la creación de una política de Estado de largo plazo, que proteja los derechos soberanos, regule las actividades que se realizan en el territorio y que confirme el compromiso medio ambiental internacional con el continente”.