Tres permisos semanales tendrán, a partir de este lunes, los menores de edad que vivan enomunas con más de dos semanas de cuarentena, para poder realizar actividades al aire libre.

La psicóloga infanto-juvenil de Vidaintegra, Karina Navarro, dice que frente al anuncio que comenzarán a regir los permisos temporales para los niños, primero, es tener claridad sobre esta salida. Los niños menores de 14 años pueden salir con un permiso y el acompañamiento de un adulto, mientras que los mayores de 14 deben sacar ese permiso por ellos mismos en la Comisaria Virtual.

Son solamente tres días a la semana y lo que pueden hacer los padres es, en el fondo, repasar las medidas de autocuidado, refuerza.

“Este permiso no es para que los niños vayan a jugar a la plaza, ya que eso también puede ser un lugar de contagio, son parara recrearse, tomar aire, salir a andar en bicicleta, siempre con el uso de mascarilla y no para hacer reuniones grupales”, remarca la especialista.

En el caso de los adolescentes –añade- “no es para ir a carretear, es una salida de esparcimiento que, si bien con todo este tiempo de confinamiento se hace necesario, los niños ya estaban con mucho estrés en sus casas igual que los padres. Por lo tanto, esta medida viene a alivianar un poco esta carga al interior de la casa dado el teletrabajo y la falta de colegio, de asistir a una institución educativa y el juego en los recreos”.

Navarro remarca que la medida es beneficiosa “porque se puede hacer ejercicio físico, hay más sol, el clima está mejor y es bastante adecuado y conveniente. Sin embargo, tenemos que educar a los más pequeños, además de vigilarlos y cuidarlos, sobre todo en el uso correcto de la mascarilla, que no anden tocando todas las cosas, que no se suban a los juegos. Tal vez hacer juegos con los padres podrían ser menos actividades menos riesgosas”.

La profesional apunta que hay que tener claro que aquellos menores que no pueden salir son los que padecen cuadros respiratorios o enfermedades de base y quienes también pueden terminar frustrándose por tener patologías.

“La recomendación para ellos es más de lo que ya siempre han escuchado: los niños que tienen patologías de base siempre han estado con límites frente a las clases de educación física por ejemplo o frente a los juegos, entonces es un poco más de lo mismo. Los padres deben explicarles desde lo verbal, que por una razón de autocuidado, de salud, no van a poder optar a este beneficio, porque podría tornarse en contra de ellos, desde su salud, y finalmente generar un problema a nivel emocional para la familia”.

Los eventuales peligros de esta medida tienen que ver con el riesgo desde la exposición, apunta.

“La sugerencia es siempre tratar de llevar a los hijos más chicos a espacios donde no haya muchos niños, donde no se produzca tanta interacción social, sino que sea siempre manteniendo esta distancia. Desde un paseo familiar, de salir a caminar hasta estirar las piernas, una cosa más sencilla que el juego habitual a lo que los niños estaban acostumbrados en la plaza. Hay que aprender que esta salida es una forma recreativa, de ejercitación, pero no de sociabilizar”.

La psicóloga remarca que “yo creo que eso es en lo que hay que tener más cuidado y educar a los niños de aquí al lunes, para que ellos sepan cuál es el uso correcto de la mascarilla; que deben andar con su alcohol gel y llegar a la casa y hacer la higiene correspondiente del correcto lavado de manos y evitar el contacto físico en el exterior. Hay que enseñarles todo esto, porque finalmente hasta que no aparezca una vacuna vamos a estar lidiando con el Covid por mucho tiempo. Por lo tanto, es una buena etapa para iniciar una psicoeducación en relación al autocuidado”.