El libro, donde se remarca que “esta vez no ganó la derecha tradicional económica, sino que una derecha renovada en las ideas, más social, más humana”, no tiene todavía fecha de lanzamiento, aunque el parlamentario espera que sea en un mes más. “Depende de la imprenta, será lo antes posible”, cuenta. Luego será repartido a los militantes de la colectividad en una gira nacional que realizará Ossandón y que se iniciará el próximo 9 de agosto en la Región de Valparaíso y que continuará el 16 de ese mes en la Región del Biobío.
“Muchos me han ayudado en esto (el texto), pero estos cuatro diputados me plantearon (la necesidad) de que lo que había hecho durante 20 años, y planteado en mis discursos, referido a mi trabajo social, había que contextualizarlo. Como el Presidente Piñera, tanto en primera y segunda vuelta, tomó esta bandera de lucha en muchas cosas, aceptando incluir en su programa la gratuidad en la educación técnico profesional, por ejemplo, resultó el proyecto de escribir este libro pequeño, pero potente. El tema de la derecha social ha ido marcando etapas. Basta mirar lo que ha pasado en Las Condes. Lo que está haciendo Joaquín Lavín con las viviendas sociales es tomar esta bandera”, remarca Ossandón al diario digital La Nación.
“NO HE HABLADO MAL” DE MOREIRA
Doce legisladores de la UDI enviaron una carta al comité ejecutivo de Chile Vamos acusándolo de estar realizando una campaña presidencial anticipada, a propósito de sus giras y talleres de capacitación para autoridades regionales. El senador Moreira se quejó de que “hay un senador que anda recorriendo el país y cuando fue a mi región habló mal de mí”.– Primero, no he hablado mal de nadie menos de Moreira y, como se lo señalé al Presidente de la República, si algo se malentendió pido disculpas. En el desayuno que compartimos los senadores de Chile Vamos con Piñera (el martes pasado en Cerro Castillo) recibí un tremendo respaldo respecto a lo que estamos haciendo. El Mandatario dijo que se trata de todo lo contrario (refiriéndose a las críticas por sus giras) y pidió que ojalá todos los parlamentarios se desplegaran por Chile para difundir la obra que estamos realizando. Eso estoy haciendo yo: ayudando al Gobierno. Fui a una primaria, perdí, tengo diferencias profundas en algunos temas con Piñera, pero no puedo estar más agradecido, porque él ha tomado muchas de las cosas que he planteado y lo está haciendo extraordinariamente bien, muchísimo mejor de lo que yo y los chilenos esperaban. Ha demostrado autoridad, capacidad y sentido común para involucrarse en los temas que al país hoy le importan. Y si lo está haciendo bien significa que a Chile le irá bien, ¿cómo no voy a estar contento?
Entonces, ¿no se trata de una campaña presidencial anticipada?
-Soy de los que creo que la derecha social puede gobernar 20 años como lo hizo la Concertación, pero para eso le tiene que ir bien a este gobierno y al Presidente de la República. El Mandatario debe ser respetado y querido por la gente para que esta agradezca las cosas que está haciendo como, por ejemplo, la batalla contra la delincuencia; y el trabajo (en pos) del respeto y la autoridad a los carabineros de la calle. Las personas deben valorar estas cosas. Si el Mandatario es querido y respetado, y además hace un buen gobierno, esto se proyectará. Hoy día debemos de trabajar justamente en lo contrario de lo que señalan estos 12 diputados y algunos senadores que están molestos. Hay que trabajar para mostrarle al país lo que está haciendo Piñera.
Pero insisto, ¿con la derecha social como bandera de lucha, usted podría llegar a La Moneda el 2022?
-Nada que ver que hablemos hoy de eso. Tengo que trabajar para que a mi gobierno le vaya bien y que el Presidente sea respetado, querido, apoyado (…) en la reunión con los senadores (de Chile Vamos) yo vi a un Mandatario mucho más estadista, interactuando con los parlamentarios, anotando lo que decían y también retrucando a veces los temas que no le parecían.
El alcalde Lavín, que también ha tomado esta bandera de lucha, ha sido cuestionado por la viviendas sociales. Lo critican de que es populista y que querría postularse a la Presidencia de la República o a gobernador.
-Lavín ha hecho algo positivo que es hablar de algo que muchos hicimos antes, pero no en una comuna como Las Condes: la integración. A mí siempre me criticaron, porque, según decían, las cosas de las que hablaba eran populistas. Me quejé muchas veces en entrevistas de que Chile era un país clasista y muy discriminador. Cuando fui alcalde de Pirque, por ejemplo, hicimos cinco villorrios agrícolas. En esa comuna nunca se había aceptado hacer viviendas sociales (…) anuncié que compraríamos terrenos y los hicimos; eso es integración. Chile es de todos, para todos y funcionó perfecto (dicho proyecto). Lo más importante que está haciendo el alcalde de Las Condes es integrar. Él puede hacerlo, tiene un municipio millonario y puede ponerse con la plata, porque hacer viviendas sociales en esa comuna es imposible, porque el precio del suelo es con el subsidio. Si hay alguien que paga la diferencia ¡maravilloso! Estos son departamentos de clase media, porque pagan dividendos de 140 mil pesos, pero igual es un apoyo a la clase media de esa comuna.
“Estas son las banderas de la derecha social. Si lo hace Lavín o cualquiera me parece bien. La semana pasada estuve en la inauguración de un proyecto integrado muy parecido al que construimos en Puente Alto, llamado San Alberto, que hizo el alcalde de Copiapó”, agrega.
A pesar de que usted señala que no es el momento de hablar de la campaña presidencial algunos políticos de oposición ya están hablando de esto. El senador PPD Ricardo Lagos Weber manifestó que creía “tener la madurez” y que estaba dispuesto a participar en la próxima elección.
-Todos tienen derecho a tener aspiraciones, me parece bien. Lagos Weber pertenece a una coalición que no existe, él acaba de salir elegido senador de nuevo, por lo tanto por los próximos cuatro años no tiene reelección, no puede darse ese gusto, pero tiene todo el derecho (de querer postularse). Él está en la oposición que está totalmente destruida y es obstructiva al gobierno. Nosotros estamos gobernando y lo que tenemos que hacer es que al Presidente le vaya bien.
CRÍTICAS DE MATTHEI AL CONGRESO
¿Usted percibe que la derecha está cohesionada? Trascendidos hablan de fisuras.-Estamos súper bien. La diversidad nuestra nos enriquece, lo importante es el respeto sin descalificaciones y que exista competencia. Yo fui acusado de populista y las cosas y banderas, que hacían que me acusaran de esto, han sido subidas a los mástiles por el propio Presidente de la República. ¿Quién se habría imaginado que el Mandatario mandaría un proyecto de ley (para modificar la Ley de Pesca) y que estas “siete familias” (que controlan la industria pesquera) tuvieran cuotas de captura para pescar en el mar? Presenté un proyecto de ley que anulaba eso y el Mandatario presentó otro y se fusionaron. Están muy encaminados a la aprobación ya en el Senado. Nadie se habría imaginado de que Piñera, después de que llegó a un acuerdo conmigo, hubiera cumplido a esa velocidad.
¿Fue un desacierto de Piñera llamar a los parlamentarios de oposición a trabajar luego de las críticas a la “sequía legislativa”?
-Si miramos lo que pasó en el pasado gobierno de Bachelet lo único que teníamos eran proyectos y más proyectos. ¿Qué le interesa al país?, ¿que existan pocos proyectos, que sean buenos, que solucionen los problemas de la gente, o hartos proyectos para que digamos que estamos trabajando? Todas las comisiones tiene una tremendas carpeta de proyectos archivados, trabajo tenemos de sobra. Lo que ha hecho el Presidente con su equipo es revisar y mejorar varias iniciativas que presentó la exmandataria, que en su diagnóstico eran buenos, pero estaban mal construidos. Esto es responsable. Llenarnos de proyectos nuevos, para decir que hemos presentado todas estas iniciativas, no sirve de nada. Al revés, le hacemos un tremendo daño al sistema y al país.
A propósito del Congreso, ¿qué le parece la crítica que le hizo la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, quien sostuvo que este “está pasando a ser cada vez más irrelevante”?
-Es una pena, porque ella fue parlamentaria y yo no la escuché decir eso antes. Los abusos que se cometían cuando Matthei estuvo en el Parlamento eran impresionantes. Los privilegios que tenían los senadores eran vergonzosos y nunca la escuché hablar de eso. Es súper fácil tirar piedras y descalificar de afuera de esa forma. Fueron muy desafortunadas sus declaraciones.
IANSA LINARES: “DEBIÓ HABERSE ANTICIPADO”
Además de la derecha social, Ossandón está preocupado por la salud de los chilenos, admite.“La crisis en esta área es muy grande. La opinión pública no la ha sopesado. Murieron, por ejemplo, 26 mil personas que estaban en la lista de espera y más de seis mil fueron reconocidas por el propio Ministerio de Salud que podrían haber muerto en el gobierno anterior por la falta de atención oportuna. Eso es grave, porque significa que hay una cifra negra inmensa (…) la salud pública chilena es buena, pero el problema es que no tiene cobertura y las personas se mueren porque no las atienden. Hemos mejorado mucho en la Atención Primaria, que es importante, porque permite prevenir”, remarca.
¿Qué le parece que el titular de Salud sea el ministro que más polémicas ha sumado?
-Tal vez comunicacionalmente ha cometido algunos errores, pero él tiene la película clara respecto al tema de salud pública que es lo que necesitamos”.
Hay mucha preocupación en Linares, porque Iansa ha señalado que no operará la remolacha en la planta de esa comuna el próximo año. Como técnico agrícola, ¿qué le ha parecido esta situación?
-Este es un tema en el marco de un negocio. Ningún gobierno será capaz razonablemente de parar una situación como la que afecta a Iansa, no es fácil. Tal vez hay que ayudar a los agricultores a reconvertirse. Si se pudiera apoyar (para evitar el cese de operaciones) sería maravilloso, pero es difícil. No he estudiado el tema, porque acá se trata de números, no conozco la realidad de Iansa, pero sí sé harto de campo, porque soy técnico agrícola. Esto debió haberse anticipado mucho antes. El gobierno pasado debió impulsar programas de reconversión para las personas que trabajan la remolacha.