La costa este de Estados Unidos está siendo afectada por una compleja ola de calor que no discrimina el cargo de sus afectados. Y es que la estatua de cera del décimosexto presidente de la nación norteamericana, Abraham Lincoln, ubicada en Washington, se derritió producto de las altas temperaturas.
La estatua, a cargo del artista Sandy Williams IV, representa una réplica a menor escala de la que se encuentra en el monumento al exmandatario, que fue construida hace 100 años y que conmemora la Proclamación de Emancipación del 1 de enero de 1863.
La escultura de 1,8 metros de altura tiene la intención de representar “comentario directo sobre la historia de Washington DC de los campos de contrabando de la época de la Guerra Civil”. No obstante, fue colocada sin considerar las altas temperaturas que alcanza la capital durante el verano.
El pasado fin de semana, los termómetros marcaron 37,7 grados Celsius, los cuales incidieron en la cabeza y el cuello de la obra. Con las horas, sus piernas y la silla comenzaron a verse afectadas.
Según informó la BBC, la estatua de Lincoln está siendo reparada, por lo que se prevé que vuelvan a pegar la cabeza del expresidente durante esta semana.
