El montaje está inspirado en el hecho ocurrido el 21 de mayo del año 2016, cuando un joven se lanzó desnudo a la fosa de los leones del Zoológico Metropolitano de Santiago y que causó repercusión mundial porque el personal a cargo debió sacrificar a los animales para evitar que lo mataran.
Se estrena el próximo jueves 8 de marzo e invita a reflexionar sobre la relación hombre-naturaleza, violencia, poder, erotismo y lenguajes escénicos, conceptos que el Colectivo Mákina Dos quiso plasmar en esta apuesta para la nueva temporada del espacio cultural de Barrio Bellavista.
“Recogemos la historia para llevar a cabo un trabajo que no busca dar cuenta del hecho real, sino tomarlo como punto de partida para generar una ficción que reflexione poéticamente sobre violencia y poder, tanto desde el punto de vista del formato como discurso escénico, como desde su temática”, explica la dramaturga y directora del montaje, Amalá Saint-Pierre.
La propuesta sitúa a un perturbado joven con evidentes delirios mesiánicos que se enfrenta a otro personaje –denominado Dios o Rey – que puede entenderse como su alter ego, una construcción mental o la representación metafórica de la naturaleza; para abordar la opresión desde una perspectiva simbólica.
“Hay una puesta en muerte que es sumamente alegórica. Él no elige a un elefante o a un gorila que pudo quizás ser más efectivo, sino al león que es el rey. Esto es un enfrentamiento de poder: del hombre versus la naturaleza, de Dios versus Dios”, subraya la creadora y miembro de la compañía fundada en 2015 en torno a lenguajes escénicos contemporáneos que buscan ser un aporte a la escena teatral en la profundización de lenguajes experimentales.
En la piel del protagonista, Daniel – nombre recogido del pasaje bíblico en el que un sabio es lanzado al foso de los leones sin recibir daño alguno– se encuentra el actor Francisco Paco López, quien realza el desafío de encarnar un rol de estas características.
“Me gusta indagar en esas cavidades mentales que, a ojos de la sociedad convencional, pueden considerarse enfermas. No lo veo tan así, creo que cada uno de nosotros es una y mil personas a la vez, es eso sobre lo que trabajo también, yo como intérprete, y desde la multiplicidad del personaje. Creo además que es un verdadero deleite explorar en un lenguaje distante al realismo y más cercano a Artaud, que es un aporte diferenciador en la oferta actual de nuestra cartelera”, subraya.
En escena el trabajo se completa con Ricardo Zavala en el papel de este alter ego, materializado en la figura alegórica del león; la visualidad de Valentina San Juan y universo sonoro elaborado a partir de la recopilación de percusiones de Martin Saint-Pierre, editadas por Francisco Baquedano.
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