El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, acusó al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) de “crear una crisis a última hora” al “retractarse de entendimientos explícitos” y anunció un aplazamiento de la reunión para ratificar el acuerdo del alto el fuego para la Franja de Gaza.
“Hamás está renegando de los entendimientos y creando una crisis a última hora que impide un acuerdo,” dijo su oficina. “Hamás se está retractando de entendimientos explícitos acordados con mediadores e Israel,” agregó, según The Jerusalem Post.
Asimismo, recalcó que “Israel no fijará una fecha para una reunión del Gobierno o del gabinete de seguridad hasta que Hamás apruebe todos los detalles del acuerdo.” En principio, la tregua comenzaría el domingo.
Previo al anuncio, la oficina de Netanyahu afirmó que Hamás estaba reclamando “dictar” los nombres de los presos palestinos que serían excarcelados en el marco del acuerdo, y recalcó que Israel contaba con capacidad de veto en este proceso.
Además, manifestó que Hamás “reclamaba dictar la identidad de estos asesinos” y acusó al grupo islamista de intentar “dar marcha atrás en los entendimientos.” Reiteró que Israel vetaría la liberación de “asesinos en masa que son símbolos del terror,” según The Times of Israel.
El acuerdo, alcanzado el miércoles tras meses de conversaciones indirectas mediadas por Qatar, Egipto y Estados Unidos, estaba dividido en tres fases. La primera de ellas, con una duración de 42 días, certificaría el cese de hostilidades, la retirada de tropas israelíes hacia la frontera y el intercambio de 33 rehenes por presos palestinos.
La segunda fase consistiría en la distribución de ayuda humanitaria “segura y eficaz” en la Franja de Gaza. También incluiría la reparación de centros sanitarios y el ingreso de suministros civiles y combustible. Según se certificara la primera fase, se darían a conocer más detalles de las siguientes.
Israel lanzó su ofensiva contra Gaza tras los ataques que dejaron cerca de 1.200 muertos y 250 secuestrados. Desde entonces, han muerto más de 46.700 palestinos en Gaza y más de 850 fallecidos en Cisjordania y Jerusalén Este, según las autoridades gazatíes controladas por Hamás.