“Yo creo que los alcaldes, con la mejor intención, están alentando al ministerio a que cometamos un delito”, fue la respuesta del titular de Salud, Jaime Mañalich, a las acusaciones de algunos de los jefes comunales por el secretismo en el manejo de la información con respecto a los pacientes contagiados por Covid-19.
El secretario de Estado sostuvo que como cartera “no podemos, bajo ningún punto de vista, entregar información de las personas que han sido diagnosticadas como positivas para coronavirus”, ya que ese proceder está sancionado gravemente en la Ley de Derechos y Deberes de los Pacientes.
Al respecto subrayó que sí “se los entregamos a la Fiscalía porque ellos están autorizados a exigirlos por ley, y así ha sido a través de un oficio del Fiscal Nacional, que nos ha impulsado, obligado, a entregar estos datos”, en los casos que el ente persecutor lo ha requerido.
Mañalich enfatizó que la necesidad de mantener en secreto la identidad de los infectados por coronavirus va más allá de la ley.
“Si hoy día ya, por el solo hecho de que una persona llega del hospital, es discriminada en su edificio, en su domicilio, se le raya el auto, se le grita violentamente, se le dice que no use los ascensores, es inimaginable lo que puede ocurrir con personas que se identifican como portadoras del coronavirus”, expuso.
Además, el ministro indicó que se necesitará la colaboración de la gente en la siguiente etapa del plan de salud, la cual se vería en entredicho si se conociera la identidad de los positivos por Covid-19.
“Queremos pasar a una estrategia de testeo masivo, a través del examen de anticuerpo. Esto depende enormemente de la voluntad de las personas de aceptar ser testeadas cuando no han tenido un síntomas (…) Si el secreto tuviera algún riesgo de ser violado, las personas no se van a ser el examen y vamos a perder un instrumento enorme para examinar”, explicó.
Para graficar estas posibles dificultades, la máxima autoridad sanitaria abordó los problemas que el Minsal ha tenido con los inmigrantes ilegales.
“Hemos tenido situaciones muy complejas con población inmigrante irregular o no legalizada, que no hemos podido alcanzarlos, a pesar de que hemos tenido amenazas de brotes en ciertas comunidades. No hemos podido alcanzarlos para que se hagan el examen de PCR ¿Por qué? Porque ellos dicen, si me identifican me van a extraditar del país”, dijo Mañalich.
“Tenemos un problema enorme en esas comunidades que no son pocas personas, de inmigrantes ilegales que residen en nuestro país y que necesitamos tratarlos, atenderlos y saber cuál es su estado de positividad o negatividad respecto a coronavirus”, añadió.
Consultado respecto a si se hace alguna autocrítica en su relación con los jefes comunales, Mañalich sentenció: “Me basta con la crítica de los alcaldes, para qué me voy a hacer autocrítica yo además”.
El secretario de Estado sostuvo que como cartera “no podemos, bajo ningún punto de vista, entregar información de las personas que han sido diagnosticadas como positivas para coronavirus”, ya que ese proceder está sancionado gravemente en la Ley de Derechos y Deberes de los Pacientes.
Al respecto subrayó que sí “se los entregamos a la Fiscalía porque ellos están autorizados a exigirlos por ley, y así ha sido a través de un oficio del Fiscal Nacional, que nos ha impulsado, obligado, a entregar estos datos”, en los casos que el ente persecutor lo ha requerido.
Mañalich enfatizó que la necesidad de mantener en secreto la identidad de los infectados por coronavirus va más allá de la ley.
“Si hoy día ya, por el solo hecho de que una persona llega del hospital, es discriminada en su edificio, en su domicilio, se le raya el auto, se le grita violentamente, se le dice que no use los ascensores, es inimaginable lo que puede ocurrir con personas que se identifican como portadoras del coronavirus”, expuso.
Además, el ministro indicó que se necesitará la colaboración de la gente en la siguiente etapa del plan de salud, la cual se vería en entredicho si se conociera la identidad de los positivos por Covid-19.
“Queremos pasar a una estrategia de testeo masivo, a través del examen de anticuerpo. Esto depende enormemente de la voluntad de las personas de aceptar ser testeadas cuando no han tenido un síntomas (…) Si el secreto tuviera algún riesgo de ser violado, las personas no se van a ser el examen y vamos a perder un instrumento enorme para examinar”, explicó.
Para graficar estas posibles dificultades, la máxima autoridad sanitaria abordó los problemas que el Minsal ha tenido con los inmigrantes ilegales.
“Hemos tenido situaciones muy complejas con población inmigrante irregular o no legalizada, que no hemos podido alcanzarlos, a pesar de que hemos tenido amenazas de brotes en ciertas comunidades. No hemos podido alcanzarlos para que se hagan el examen de PCR ¿Por qué? Porque ellos dicen, si me identifican me van a extraditar del país”, dijo Mañalich.
“Tenemos un problema enorme en esas comunidades que no son pocas personas, de inmigrantes ilegales que residen en nuestro país y que necesitamos tratarlos, atenderlos y saber cuál es su estado de positividad o negatividad respecto a coronavirus”, añadió.
Consultado respecto a si se hace alguna autocrítica en su relación con los jefes comunales, Mañalich sentenció: “Me basta con la crítica de los alcaldes, para qué me voy a hacer autocrítica yo además”.
