“Estamos muy complicados, porque se han producido situaciones que aparentemente parecen ser violaciones de los derechos humanos”, admitió este martes el ministro de Justicia, Hernán Larraín, al abrirse a la posibilidad de eventuales casos de vulneraciones contra ciudadanos ocurridas durante el estado de emergencia.
Tras una reunión que sostuvo en La Moneda junto a sus pares de Interior, Gonzalo Blumel, y de la Mujer y Equidad de Género, Isabel Plá, con el equipo del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), encabezado por su director, Sergio Micco, el secretario de Estado manifestó que hay antecedentes complejos en determinados hechos y casos.
Al respecto aseveró que si bien está la urgencia es restablecer el orden público, lo cierto es que no se pueden aceptar atentados de este tipo contra los ciudadanos.
“No queremos que Chile haya ningún atentado a los respetos necesarios de los derechos de las personas. Entendemos la urgencia de tener el orden público (…) pero no vamos a aceptar que se vean afectados y que haya violaciones a los DDHH de los chilenos”, refrendó.
Sobre el actuar de Carabineros en las manifestaciones, aseguró que “se están aplicando bastante bien”, aunque aclaró que no basta con cumplir la ley, sino que se apliquen los protocolos respectivos.
“No basta con cumplir la ley y el orden constitucional, tenemos que cumplir los protocolos, las reglas básicas, los estándares incluso éticos que puedan garantizarle a la gente es el ejercicio y el respeto de sus derechos”, aseveró.
Sobre eventuales responsabilidades políticas por presuntos apremios ilegítimos, comentó “los juicios que se hacen probablemente hoy día no son lo objetivo o lo independientes que se merecen”, subrayó.
Sobre el grupo de observadores en DDHH que enviará la ONU en el país, que se postergó unos días, aseguró que están todas las condiciones para que su trabajo “tenga más pleno éxito” y que “la misión iniciará sus trabajos formalmente el día de mañana por la tarde”, con una reunión con los ministerios de Interior y Justicia.
Tras una reunión que sostuvo en La Moneda junto a sus pares de Interior, Gonzalo Blumel, y de la Mujer y Equidad de Género, Isabel Plá, con el equipo del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), encabezado por su director, Sergio Micco, el secretario de Estado manifestó que hay antecedentes complejos en determinados hechos y casos.
Al respecto aseveró que si bien está la urgencia es restablecer el orden público, lo cierto es que no se pueden aceptar atentados de este tipo contra los ciudadanos.
“No queremos que Chile haya ningún atentado a los respetos necesarios de los derechos de las personas. Entendemos la urgencia de tener el orden público (…) pero no vamos a aceptar que se vean afectados y que haya violaciones a los DDHH de los chilenos”, refrendó.
Sobre el actuar de Carabineros en las manifestaciones, aseguró que “se están aplicando bastante bien”, aunque aclaró que no basta con cumplir la ley, sino que se apliquen los protocolos respectivos.
“No basta con cumplir la ley y el orden constitucional, tenemos que cumplir los protocolos, las reglas básicas, los estándares incluso éticos que puedan garantizarle a la gente es el ejercicio y el respeto de sus derechos”, aseveró.
Sobre eventuales responsabilidades políticas por presuntos apremios ilegítimos, comentó “los juicios que se hacen probablemente hoy día no son lo objetivo o lo independientes que se merecen”, subrayó.
Sobre el grupo de observadores en DDHH que enviará la ONU en el país, que se postergó unos días, aseguró que están todas las condiciones para que su trabajo “tenga más pleno éxito” y que “la misión iniciará sus trabajos formalmente el día de mañana por la tarde”, con una reunión con los ministerios de Interior y Justicia.
