El cantautor nacional, Mauricio Redolés, contó el calvario que vive desde hace meses por el funcionamiento de una discoteque clandestina en el Barrio Yungay, lugar donde reside hace más de 30 años.
El poeta, en una sentida publicación en sus redes sociales, aseguró que en 2020 hubo un incendio en calle Rafael Sotomayor y que “una de esas casas fue tomada por un grupo de personas irrespetuosas del necesario descanso de los vecinos hace un año y medio aproximadamente e instalaron una discoteca clandestina que funciona de viernes a domingo hasta altas horas de la madrugada”.
Redolés afirmó que ha tratado de reunirse con las autoridades de la Municipalidad de Santiago y que ha sido amedrentado por aquello: “Un par de las organizadoras (del local) han venido a mi casa para tratarme de ser un viejo que no acepta la cultura juvenil”, indicó.
En su denuncia el artista también emplazó a la alcaldesa Irací Hassler (PC) para detener el funcionamiento de esta discoteca, que opera bajo el nombre de “Casa Rota”.
“Le pregunto señora Irací Hassler ¿debo mudarme de mi barrio porque los vecinos no tenemos un municipio que se encargue del bienestar de sus habitantes y sucumbe ante la prepotencia de los más gritones? Yo voté por usted. No sé si volvería a hacerlo“, dijo Redolés.
LA REACCIÓN DE HASSLER
Irací Hassler, a través de la misma publicación de Instagram, le dijo al músico que “comparto su preocupación, para esta administración es una prioridad que nuestras comunidades vivan en paz y tranquilidad”.
“Estamos recuperando casas tomadas en comisión de delito, llevamos 25 en este año. Es un proceso complejo de coordinación con policías y fiscalía, que trae resultados para recuperar los barrios”, señaló la alcaldesa.
Junto a lo anterior, dijo que se había contactado con Mauricio Redolés “para que hagamos el seguimiento del espacio denunciado y continuemos recuperando los espacios que afectan el buen vivir en el bello barrio Yungay”.