El primer ministro Boris Johnson debe anunciar este mes su decisión de retirar progresivamente los equipamientos del fabricante chino Huawei de la red 5G británica, afirmó el lunes el diario económico Financial Times, citando a fuentes del gobierno.
“Estoy decidido a que el Reino Unido no sea de ningún modo vulnerable a proveedores estatales de alto riesgo, así que tendremos que pensar cuidadosamente cómo gestionar eso, tendremos que encontrar las soluciones tecnológicas adecuadas”, se limitó a decir Johnson en un video divulgado el lunes por varios medios británicos.
A su vez, el ministro Oliver Dowden, a cargo del sector Digital, Cultura, Medios y Deporte, reafirmó que el ejecutivo busca “diversificar sus equipamientos para reducir la participación de proveedores de alto riesgo, de los cuales Huawei es el principal”.
Según el FT, Johnson tiene la intención de excluir a Huawei principalmente porque las sanciones estadounidenses anunciadas en mayo plantearían, según un informe de seguridad nacional británico, dudas “muy, muy graves” sobre la capacidad de Huawei para seguir proporcionando material para la red británica 5G.
Dowden confirmó haber recibido un informe del Centro Nacional de Ciberseguridad sobre el impacto de dichas sanciones y afirmó que estas impondrían “obstáculos”.
Estas están diseñadas, entre otras cosas, para impedir el acceso de Huawei a los semiconductores hechos con componentes estadounidenses.
Y, según el diario financiero, al gobierno británico le preocupa que los chinos recurran a equipamientos de reemplazo que puedan plantear nuevos riesgos de seguridad.
Pero el embajador de China en Londres, Liu Xiaoming, advirtió el lunes que excluir a Huawei podría dañar la reputación internacional del Reino Unido y erosionar la confianza de otros inversores extranjeros.
Y sugirió en rueda de prensa en la capital británica que mostraría que el país se pliega ante la “presión extranjera”, en una clara referencia a la posición de Washington sobre Huawei.
La administración de Donald Trump acusa al grupo chino de espiar para Pekín y está presionando en todo el mundo para que se lo excluya de las redes de internet móvil de última generación.
Huawei siempre ha negado las acusaciones de espionaje y afirma que se trata de una guerra comercial.
En enero, Londres había dado luz verde a la participación de Huawei en infraestructuras no estratégicas de su red 5G, limitando su participación al 35%.
Pero en mayo, la prensa británica informó de que Johnson estaba reexaminando los vínculos del régimen chino con Huawei e incluso consideraba la posibilidad de excluir al grupo de su 5G para 2023.