Olvidadas en el asiento de atrás de un automóvil en 1968, fueron ofertadas por Alan Herring, chofer de Ringo Starr y George Harrison, dos de los cuatros miembros de Los Beatles, a finales de los años 60.
Herring explicó que, un día, recogió a Starr, Harrison y Lennon y los condujo “a la oficina”. “Cuando John salió del coche, me di cuenta de que había olvidado sus gafas de sol en el asiento trasero y que un cristal y una varilla se habían soltado”, añadió. “Le pregunté a John si quería que las reparase. Y me contestó: ‘no te preocupes, son solo parte del estilo’”, indicó el exconductor, acotando que finalmente “no las reparé, las guardé tal y cómo estaban, como John las había dejado”. Otras reliquias de la banda de Liverpool fueron ofrecidas a los compradores, como un collar de perlas con campanillas que perteneció a George Harrison, vendido por 10.000 libras esterlinas (unos US$ 13.334).
“John Lennon y sus emblemáticas gafas de sol son indisociables. (…) Son las gafas de sol más míticas de la historia del rock and roll”, declaró en un comunicado Gabriel Heaton, especialista de libros y manuscritos en Sotheby’s.
Un siglo después de la “Beatlemania”, “los objetos ligados a esta banda son más populares que nunca”.