La reina de Inglaterra, Isabel II, ha lamentado el “gran vacío” dejado por su esposo Felipe, duque de Edimburgo, fallecido el pasado viernes, según ha resaltado este domingo Andrés, duque de York.
“Hemos perdido al abuelo de la nación”, ha declarado Andrés, que ha lamentado la “pérdida tremenda” que supone su muerte, que sin embargo ha servido par a “unir a la familia” para ayudar a la reina, informa la BBC.
Este domingo se ha celebrado una misa en la catedral de Canterbury, en la que el arzobispo de Canterburi, Justin Welby, ha recordado a Felipe.
“Para la familia real, igual que para cualquier otra persona, ninguna palabra puede describir la profundidad del pesar que supone esta pérdida”, ha afirmado. El propio Welby será el encargado del funeral previsto para el sábado que viene en el castillo de Windsor.
Junto al príncipe Andrés han estado presentes el duque y la condesa de Wessex y su hija, la dama Luisa de Windsor. Andrés ha expresado su agradecimiento por los “impresionantes homenajes” al príncipe Felipe.
“La reina, como pueden suponer, es una persona increíblemente estoica. Ha descrito el gran vacío que ha dejado (Felipe) en su vida, pero nosotros, su familia, quienes estamos cerca, estamos uniéndonos para que reciba apoyo”, ha relatado.