Sin duda alguna, Santiago Ford se ha convertido en uno de los mayores protagonistas del Team Chile en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, tras conseguir el pasado martes una histórica medalla de oro en el decatlón.

Su triunfo, rápidamente desató la alegría de miles de fanáticos en nuestro país, y de las personas presentes en el Estadio Nacional. Sin embargo, un particular hecho llamó la atención en su última prueba para concretar la obtención de la presea dorada. 

Y es que antes de finalizar la competición de los 1.500 metros, el atleta cruzó caminando la meta, algo que tiene relación con su especial historia para poder llegar a nuestro país. 

Una vez terminada la prueba, el chileno-cubano explicó a los medios que “esa llegada a la meta, cuando frené, no fue porque quise pararme sino porque me acordé cuando estaba caminando por el desierto a las 5 de la mañana, sin saber qué hacer pero con el objetivo claro que era llegar aquí”. 

“Esos últimos 10 metros fueron reflejo de la madrugada, deshidratado. Pero en mi corazón y en mi mente yo sabía lo que quería”, añadió el deportista, visiblemente emocionado. 

De acuerdo al relato del propio Ford, decidió dejar su natal Cuba en el año 2018, debido a que era difícil obtener respaldo si no se conseguía medallas en grandes competencias. Bajo ese contexto, el nacionalizado chileno voló hasta Guyana, país en el que esperó 10 días para ingresar a Brasil.

Posteriormente, atravesó la selva hasta llegar a Manaos, y acto seguido, abordó un avión con destino a Perú, donde gastó los últimos 30 dólares que le quedaban. Luego, caminó por el desierto hasta llegar a territorio nacional, y tiempo después, se enteró de que pasó por un campo minado.

Respecto a sus inicios en Chile, Ford reconoció que “al principio quizás no fue como pensaba, pero nunca perdimos la esperanza”. No obstante, concluyó con que “Dios me dio la oportunidad de crear una familia maravillosa. Cinthia, mi polola, que me banca de principio a fin. Mi hijo, mi entrenador, mis padres en Cuba”.