La Academia de cine de Estados Unidos expulsó hoy a Bill Cosby y Roman Polanski, ambos condenados por agresión sexual, en medio de una nueva era de tolerancia cero en Hollywood.
El actor de 80 años y el director franco-polaco, de 84, se unen al extodopoderoso productor Harvey Weinstein, también desterrado de la organización que entrega los Óscars, los premios más prestigiosos del cine.
Acusaciones de acoso y abuso contra Weinstein por parte de un centenar de mujeres desataron un escándalo en Hollywood que salpicó a otros pesos pesados de la industria como los galardonados Kevin Spacey y Woody Allen.
En un escueto comunicado, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas indicó que en una reunión de los 54 miembros de su junta de gobernadores, el 1 de mayo, se decidió expulsar a Cosby y Polanski apoyándose en el código de conducta que lanzó en diciembre pasado, pero sin hacer referencia directa a los casos.
“La junta continúa alentando que los miembros mantengan los valores éticos de respeto a la dignidad humana que requiere la Academia”, añadió el texto.
Cosby fue declarado culpable la semana pasada de drogar y agredir sexualmente a Andrea Constand, de 45, en enero de 2004, mientras que el director franco-polaco lleva cuatro décadas prófugo de la justicia estadounidense por haber mantenido relaciones sexuales en 1977 con Samantha Geimer, cuando ésta tenía 13 años.
El aclamado realizador llegó a declararse culpable a cambio de que la fiscalía retirara los cargos más graves, pero huyó a Francia convencido de que el juez no respetaría el acuerdo y lo mandaría a prisión.
Desde entonces no ha vuelto a poner los pies en Estados Unidos, al no tener garantías de que permanecerá en libertad. Otras tres mujeres han acusado a Polanski, de 84 años, de agresiones sexuales cometidas en las décadas de 1970 y 1980, cuando eran menores.
Geimer, hoy con 54 años, calificó la expulsión como un acto “cruel que sirve únicamente para las apariencias”. “No aporta nada para cambiar la cultura sexista de hoy en Hollywood y prueba que se comerían a su propia gente para sobrevivir”.
“Le digo a Roman: te liberas de la basura, la Academia no tiene honor“, escribió en Twitter.