Durante el capítulo de este domingo del reality de Canal 13 “Tierra Brava”, Junior Playboy sufrió una grave complicación en uno de sus ojos, situación que obligó a que fuera atendido por personal médico.

El problema que vivió el integrante del encierro, tuvo relación con los lentes de contacto que suele ocupar en el programa, lo que le provocó una evidente hinchazón en la zona afectada, y en las últimas horas, se han ido conociendo mayores detalles en torno a su condición. 

“El accidente del ojo fue cuando hicimos el ‘Cara a cara’ y me puse los lentes de contacto para jugar con ‘Thor’”, manifestó Junior, según consignó La Cuarta.

Asimismo, recordó que “al otro día desperté como con una sensación que tenía como una piedrita en el ojo, pero hasta ahí podía ver bien (…). Hicimos el fuego por la tarde con la Angélica (Sepúlveda), empecé a hacer fuego, soplando dentro del tarro con humo para que le llegara más fuego, y se llenó de humo”. 

Posteriormente, el ex “40 o 20” señaló que “ahí ya empeoró, y el ojo se me fue a la mier…”, y comentó que la inflamación se debió a una mezcla “entre el lente de contacto y el fuego”. 

En tanto, indicó que cuando le revisaron el ojo, “pensaron que era una piedrita. No me pillaron nada, pero el dolor era tremendo, cerrar el ojo me dolía, lo abría y me dolía”. 

“Me acosté y ahí empezó a dolerme más, dije ‘lo voy a cerrar’, y cuando lo cerré sentí como que me estaban pasando una Gillette; ahí me dieron ganas de pegarle a la cama, como que tenía mucha rabia, que salí y me di una vuelta en todo el patio para ver si se me pasaba el dolor”, añadió. 

Por su parte, afirmó que después de que el conductor del programa, Sergio Lagos, viera su ojo, le dijo que tenían que atenderlo. “A la mañana siguiente me llevaron a la clínica; lo bueno es que después me inyectaron, me limpiaron y después me dieron una buena atención aquí”, sostuvo.

Respecto al diagnóstico que le dieron, precisó que fue una “úlcera en un ojo, al medio del ojo”, y explicó que el tratamiento consiste en “gotitas y descansar el ojo; porque, aunque tú no lo creas, al mover el ojo izquierdo, el derecho también se mueve, y hay que estar lo más quieto para que se vaya sellando eso, porque se me hizo como una soldadura, pero con líquido”. 

“Ese dolor de mier… ya pasó, el dolor fuerte”, reconoció, y declaró que ahora “cuido el ojo como nunca porque es una pieza muy importante”. 

En la misma línea, concluyó diciendo que no volverá a ocupar lentes de contacto. “Ni para broma, ni para nada”, sentenció.