Respecto a las protestas de feligreses osorninos, Barros respondió que “no confundan a un grupo con una Diócesis. En Osorno he tenido momentos muy lindos. Hay gente que participa con mucho cariño en la Iglesia, con mucho respeto en las celebraciones religiosas, y también con adhesión al pastor que el santo padre les ha enviado”. Al ser consultado si no pensó no participar de los actos del Papa en Chile para evitar polémicas, el obispo expresó que “participar en la misa para uno es lo más grande, y eso es lo que prima, por mucho que haya algún otro comentario”.
“Un sacerdote tiene que estar puesto en Dios (…) ¿Quién es perfecto en este mundo? Jesús no elige a los perfectos”, finalizó.
A su vez, el arzobispo emérito de Santiago, Francisco Javier Errázuriz, aseguró que el Papa está “convencido que Barros no ha cometido ningún delito y no lo va a cambiar”.