Una alianza entre el Ministerio de Justicia, Gendarmería, Banco Estado y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) permitirá entregar 300 mil dólares en capital semilla a mujeres emprendedoras que cumplen condena al interior del Centro Penitenciario Femenino de San Joaquín, recinto que será visitado por el Papa Francisco este martes 16 de enero.
La iniciativa, denominada “Programa de Reinserción Económica y Emprendimiento para Mujeres en Conflicto con la Ley”, se focalizará en los factores que influyen en la comisión del delito, específicamente en el área de salud mental, formación en habilidades prosociales, capacitación en temas laborales.
El objetivo del programa es prepararlas para el egreso tras cumplir condena, culminando con la inserción laboral en un trabajo dependiente o como microemprendedoras con acceso a capital semilla y a un microcrédito.
El subsecretario de Justicia, Nicolás Mena, destacó esta iniciativa que busca contribuir a reducir los índices de victimización a través de la interrupción de conductas delictuales que llevan a la reincidencia.
“Es fundamental entregarles herramientas en capacitación, educación y trabajo, además de valores, en el entendido de que las personas privadas de libertad siguen siendo seres humanos con dignidad y derechos, que merecen una segunda oportunidad. Ese es el mensaje que nos trae el papa Francisco con su visita a la cárcel de mujeres”, añadió Mena.
El programa se extenderá por 14 meses, período en que se espera que las internas fortalezcan sus capacidades personales y se empoderen económicamente, de tal forma tal que desistan de su carrera delictiva cuando regresen a la comunicad.
La iniciativa, denominada “Programa de Reinserción Económica y Emprendimiento para Mujeres en Conflicto con la Ley”, se focalizará en los factores que influyen en la comisión del delito, específicamente en el área de salud mental, formación en habilidades prosociales, capacitación en temas laborales.
El objetivo del programa es prepararlas para el egreso tras cumplir condena, culminando con la inserción laboral en un trabajo dependiente o como microemprendedoras con acceso a capital semilla y a un microcrédito.
El subsecretario de Justicia, Nicolás Mena, destacó esta iniciativa que busca contribuir a reducir los índices de victimización a través de la interrupción de conductas delictuales que llevan a la reincidencia.
“Es fundamental entregarles herramientas en capacitación, educación y trabajo, además de valores, en el entendido de que las personas privadas de libertad siguen siendo seres humanos con dignidad y derechos, que merecen una segunda oportunidad. Ese es el mensaje que nos trae el papa Francisco con su visita a la cárcel de mujeres”, añadió Mena.
El programa se extenderá por 14 meses, período en que se espera que las internas fortalezcan sus capacidades personales y se empoderen económicamente, de tal forma tal que desistan de su carrera delictiva cuando regresen a la comunicad.