Un grupo de científicos de la Universidad de Chile, en conjunto con expertos de Bélgica y Alemania, se encuentra estudiando el norte grande del país, en una zona donde crece la Tillandsia Landbeckii, conocida popularmente como Clavel del Aire, una planta adaptada a climas de extrema sequedad que orienta su crecimiento hacia la dirección de la camanchaca.

Utilizando modelos matemáticos y observaciones satelitales, los científicos estudiaron los patrones de las estructuras que se repiten en la organización físicas del Clavel de Aire, ejemplar que aprovecha el agua en el desierto de Atacama, la cual proviene de la camanchaca.

“La orientación que descubrimos responde a que las plantas obtienen agua y nutrientes de la neblina. Observamos dos direcciones que coexisten, hileras perpendiculares e hileras oblicuas, siendo esté un descubrimiento crítico que no habíamos visto previamente, lo que indica que las plantas están respondiendo a diferentes niveles de estrés hídrico”, comentó la primera autora del paper de Scientific Reports, Belén Hidalgo Ogalde.

LOS PATRONES EN LA NATURALEZA

El estudio tiene implicaciones prácticas para la agricultura en climas adversos, sugiriendo que los cultivos deben plantarse en la dirección de la neblina para maximizar los recursos. Además, proporciona una medida de la salud del ecosistema. Lo anterior ha despertado el interés de ecólogos y biólogos que buscan preservar el Clavel del Aire.

“La orientación oblicua de los patrones de estas plantas indica estrés hídrico, reflejando la presión que ejerce el cambio climático en estos sistemas naturales”, complementó Hidalgo.

El equipo determinó que, mientras más inclinados sean estos patrones, mayor es el estrés para las plantas, infiriendo que a más de una orientación se observa la presencia de una aridez no despreciable, producto del inminente cambio climático.

Anteriores estudios ya han encontrado patrones en las plantas del desierto, como la forma en que se relacionan las raíces para aprovechar el agua. Ahora, gracias a imágenes satelitales se estableció la orientación de esta planta. Las imágenes fueron analizadas con simulaciones numéricas y cálculos teóricos, los que fueron corroborados con imágenes satelitales de los patrones formados por la planta.

El modelo resultante podría ser utilizado en futuras investigaciones en otras regiones áridas, tales como: México, Arabia Saudita, Somalia y Nigeria, para así entender la autoorganización de las plantas en respuesta a la escasez de recursos y el cambio climático.