El gobierno húngaro extendió hasta marzo de 2025 el “estado de emergencia por inmigración masiva” inicialmente instaurado en 2016 tras la llegada de cientos de miles de refugiados a Europa por la ruta de los Balcanes.
El decreto, firmado por el primer ministro ultranacionalista Viktor Orbán y publicado en la Gaceta Oficial el lunes por la noche, establece el estado de emergencia en toda Hungría.
Este estado permite al gobierno tomar medidas para limitar la inmigración sin necesidad de consulta al Parlamento, práctica que ha sido objeto de críticas por parte de la oposición.
Adicionalmente, se mantiene el “estado de emergencia por guerra y catástrofe humanitaria en un país vecino”, en vigor cada seis meses desde mayo de 2022, a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
El estado de emergencia migratorio fue declarado inicialmente el 9 de marzo de 2016, en respuesta a la crisis migratoria del otoño de 2015, cuando centenares de miles de refugiados atravesaron Hungría.
La policía húngara reporta actualmente menos de 500 intentos semanales de entrada ilegal en el país, según los datos más recientes.
