Cientos de personas de 14 años de edad en adelante, llegaron hasta el Hospital Clínico de la Universidad de Chile (HCUCH) para testearse de forma rápida, segura y gratuita contra el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH). La campaña de testeo masivo organizada por el recinto asistencial de la Casa de Bello busca alertar de forma temprana a quienes han contraído el virus para poder tratarlos oportunamente y así no desarrollen la enfermedad, y también prevenir que contagien a otras personas. “La pandemia invisible: el VIH continúa”, es el lema de este año.
“Suena tremendo pero se está muriendo gente de Sida en Chile actualmente en el año 2022”, dijo categórico el dr. Carlos Beltrán, médico infectólogo y presidente de la Corporación Sida Chile. “Esto es algo impensado con las terapias que existen. Es gente que tiene VIH y no lo sabe. Puede tener conductas sexuales de riesgo y transmitir el virus. La gente se ha olvidado que el Sida sigue siendo letal si no se enfrenta oportunamente. Entonces tiene consecuencias para la salud de las personas y la salud pública. Esa es la importancia de estas campañas de testeo”, agregó.
Este año, al tradicional chequeo masivo, la U. de Chile suma el autotest de VIH, una prueba que sigue la misma lógica de los test de antígeno contra el Covid-19 a los cuales la ciudadanía ya está acostumbrada. Con una gota de sangre se puede saber en 20 minutos si se posee o no el virus. De ser positivo, la persona debe asistir a un recinto de salud a realizarse el Test de Elisa para confirmar el diagnóstico e iniciar tratamiento. El autotest estará disponible en farmacias en las próximas semanas.
El director del HCUCH, dr. Eduardo Tobar, explicó que esta actividad “busca sensibilizar en relación al diagnóstico y la prevención de la infección por el VIH. En Chile ya veníamos mal y la pandemia sin lugar a dudas, como con otros problemas sanitarios, ha significado la postergación de múltiples actividades de prevención, diagnóstico y terapia. Estamos viendo más pacientes que llegan en etapas avanzadas y hay un incremento explosivo en los casos a nivel nacional, de manera tal que tenemos que volver a tomarle el peso y a sensibilizar a toda nuestra comunidad, sobre todo aquellos más jóvenes que pueden tener mayor incidencia de conductas de riesgo y que eso contribuye a que se infecten y pueden desarrollar la enfermedad”, dijo.
Existe una cifra negra que se estima en 20 mil personas que viven con este virus que ataca el sistema inmunitario del cuerpo, sin saberlo y por lo tanto contagian a sus parejas sexuales si no toman las precauciones necesarias y pierden la oportunidad de tratarse. Si no hay testeos preventivos de por medio, las personas contagiadas se dan cuenta cuando ya tienen síntomas graves, que pueden desencadenar incluso la muerte.
UNA NUEVA ALTERNATIVA: EL AUTOTEST
El director del Centro de VIH del HCUCH, dr. Alejandro Afani, detalló la relevancia del nuevo autotest. “Es importante acelerar el acceso al diagnóstico y el testeo rápido”, por eso “estamos promoviendo una novedad que es el autotest, aprobado este año por el Instituto de Salud Pública”, detalló, agregando que “es importante que esta nueva estrategia pueda llegar al mayor número de personas, porque es urgente disminuir la brecha que hay entre quienes conocen su diagnóstico y tratamiento, versus aquellas que no lo conocen, porque aquellas que no están en tratamiento transmiten el virus. Las personas que están en tratamiento se hacen indetectables del virus y no transmiten el virus”.
Latinoamérica está entre las únicas tres regiones del mundo en que no se observa una disminución de los casos nuevos de VIH, como ocurre a nivel mundial, sino que por el contrario, los casos de VIH van en aumento. Y Chile dentro de Sudamérica es el país con más aumento en el número de casos nuevos, agrega el dr. Beltrán. Disminuyó también sustancialmente el número de diagnósticos en el país, se estaban diagnosticando alrededor de 7.000 personas anuales de casos nuevos y durante la pandemia esto bajó a menos de 5.000.
TESTEO MASIVO
Hasta la carpa de testeo llegaron transeúntes, estudiantes y funcionarios del recinto de salud para chequearse. Un proceso rápido que empieza con la firma de un consentimiento informado, un pequeño pinchazo en el dedo y una breve espera de 15 a 20 minutos por el resultado. Tiempo suficiente para conversar con profesionales de salud mental también presentes para entregar orientación y contención en caso de salir positivo. Todo el proceso es confidencial.
Cristóbal Pino, de 18 de edad, estudiante que fue a testearse, dijo que si bien en su grupo de amigos pertenecientes a la diversidad sexual y de género sí existe conciencia de la prevención y el testeo de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual, no pasa lo mismo con sus cercanos heterosexuales. “Vine para estar seguro de que soy negativo, sé que será así pero mejor prevenir que curar. Antes me había hecho el test de Elisa también. Las personas heterosexuales no tienen ningún interés en conocer su estado, dentro de mi círculo sí”, declaró.
El dr. Afani agregó que la iniciativa también busca contribuir y aportar con las políticas públicas del Ministerio de Salud en el sentido de aumentar el testeo. “Por esto también vamos a continuar realizando el test rápido de manera gratuita durante todo el año”, agrega.