Un hombre cargado con explosivos murió este miércoles mientras intentaba ingresar al Supremo Tribunal Federal de Brasilia, en un ataque fallido que ocurre menos de dos años después de la protesta contra el presidente Lula en ese mismo lugar.

El atentado se realizó antes de la cumbre de líderes del G20, que tendrá lugar la próxima semana en Río de Janeiro, y de una visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Brasilia.

“Primero hubo la explosión” de un automóvil. Posteriormente, “un ciudadano se acercó al Supremo Tribunal Federal, intentó ingresar, no lo logró y la explosión se produjo en la puerta”, declaró en rueda de prensa la gobernadora en funciones de Brasilia, Celina Leao.

Según Leao, la información preliminar apunta a un “suicidio”. “Confiamos en que haya sido un lobo solitario”, agregó.

De acuerdo con un documento de la policía civil difundido por Globonews, el autor del ataque fallido es Francisco Wanderley Luiz, propietario del vehículo que explotó.

Leao señaló anteriormente que la identificación fue compleja debido a que el cuerpo fue encontrado con “artefactos encima”.

Wanderley había sido candidato a concejal en las municipales de 2020 por el Partido Liberal del expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro.

Las explosiones ocurrieron en un breve intervalo hacia las 19:30 locales y no resultaron en ningún herido.

La sede del Supremo Tribunal Federal se sitúa en la Plaza de los Tres Poderes, donde también se encuentran el Palacio de Planalto, sede de la Presidencia, y el Congreso.

El presidente Luiz Inácio Lula da Silva ya había salido de Planalto en el momento de las explosiones, confirmó a la AFP un portavoz de la presidencia.

FUEGO Y HUMO

“Estaba en la parada y el hombre pasó (…) De repente escuché un ruido, miré hacia atrás y vi fuego y humo. Llegaron los guardias de seguridad del STF”, narró a medios locales Laiana Costa, funcionaria administrativa del Tribunal de Cuentas de la Unión.

El sargento Rodrigo Santos informó que varios agentes, mientras patrullaban, vieron un auto en llamas y con humo.

“El individuo salió corriendo del vehículo”. Fue la misma persona que posteriormente murió, confirmó a los medios.

El auto contenía “una especie de bomba, varios explosivos fraccionados, atados con ladrillos”, añadió el sargento, mencionando que personal del Congreso colaboró con extintores para apagar el fuego.

En un comunicado, la corte suprema informó que “al final de la sesión (…) se escucharon dos fuertes estruendos y los ministros fueron evacuados del edificio con seguridad».

El Palacio Presidencial fue cerrado y toda la zona, acordonada, mientras un gran despliegue de seguridad tuvo lugar en la Plaza de los Tres Poderes, según observó un fotógrafo de la AFP.

La Policía Federal informó de la apertura de una investigación para esclarecer el origen de «los ataques».