Un gran hito fue el que consiguió un grupo de neuroingenieros de la Universidad de Nueva York (NYU), en sede Abu Dhabi, y del Massachusetts Institute of Technology (MIT), luego de crear una “píldora inteligente” capaz de controlar el apetito a través de pulsos eléctricos.
El dispositivo fue llamado FLASH, y es descrito por la NYU como el “primer dispositivo electrocéutico ingerible de su tipo para la neuromodulación del eje intestino-cerebro”.
En la misma línea, el tratamiento con esta píldora se trata de un método no invasivo, que podría ayudar a contrarrestar síntomas de enfermedades metabólicas y neurológicas.
Concretamente, la creación de FLASH fue llevada a cabo por el profesor Khalil Ramadi, director del Laboratorio de Neuroingeniería Avanzada y Medicina Traslacional de la NYU Abu Dhabi; y Giovanni Traverso del MIT con su alumno James McRae.
El invento utiliza los electrodos de su superficie para estimular eléctricamente el tejido de la mucosa del estómago. Dicha acción, trabaja sobre el eje intestino-cerebro, el que está encargado de regular varias funciones fisiológicas como la alimentación y el comportamiento emocional, según detallan los científicos.
Específicamente, los expertos explicaron que la cápsula posee un recubrimiento absorbente de fluidos con patrones acanalados y una superficie hidrofílica, lo que la protege de los fluidos gástricos y permite que los electrodos tengan contacto directo con la mucosa intestinal, en base a información recabada por Radio Biobio.
Esta estimulación gástrica induce la liberación de la hormona grelina, que es la causante de estimular el hambre. Posteriormente, la píldora funciona por 20 minutos, para ser excretada dos semanas después, según se demostró en el estudio con animales.