El médico cirujano James Hamilton, uno de los denunciantes en el caso de abusos del cura Fernando Karadima, se reunió con el arzobispo de Malta Charles Scicluna, delegado papal para reunir más antecedentes respecto al supuesto encubrimiento del obispo Juan Barros en este caso.
El encuentro sostenido en el edificio de Obras Misionales Pontificias se extendió por más de una hora y, si bien Hamilton se encontraba acompañado con otra de las víctimas de Karadima, el filósofo José Andrés Murillo, éste igualmente tuvo la posibilidad de conversar con Scicluna.
Tras la reunión Hamilton sostuvo que al hablar del caso con otros sacerdotes “uno se da cuenta de no solo el crimen de omisión de Errázuriz y Ezzati, sino que también de acción porque se ve claramente que ellos más de alguna vez fueron a decirle a Karadima que se quedara tranquilo, que estaban estas acusaciones en su contra pero que no iban a prosperar”.
“Errázuriz y Ezzati dicen lo que quieren, son dos viles delincuentes capaces de engañar incluso al Papa” declaró el cirujano, a lo que agregó que pese al levantamiento de antecedentes, lo considera una señal sin peso, pues “a la iglesia sigue sin importarle un comino, por lo menos a este Papa y algunos obispos dentro del vaticano les importa un comino el tema del abuso, porque son muchos de ellos abusadores, no digo el Papa obviamente, sin embargo, hay otros sacerdotes en la Iglesia y en el Vaticano que han dado una lucha férrea por ir contra el abuso y esclarecer la verdad”.
