Dos mujeres, madre e hija, fueron halladas muertas en su domicilio de Punta Arenas, presentando un avanzado estado de descomposición. Se encontraban desaparecidas desde hacía varias semanas.
Tras recibir una denuncia por presunta desgracia de un hombre preocupado por su expareja y su madre, detectives de la Brigada de Homicidios de la PDI obtuvieron una orden judicial para ingresar a la residencia ubicada en la calle Eusebio Lillo, en la Población Carlos Ibáñez, recogió Radio Biobío.
A pesar de las diligencias preliminares en los alrededores del inmueble, no fue sino hasta la autorización para ingresar a la vivienda que se descubrieron los cuerpos, los cuales incluso mostraban signos de momificación y daños por roedores.
Peritos y detectives de la PDI iniciaron una investigación para identificar a las víctimas, cuyos restos estaban tan deteriorados que se requería una autopsia para determinar lo ocurrido.
Mientras tanto, se realizaba un empadronamiento con los vecinos para establecer cuándo fueron vistas por última vez las mujeres.
La fiscal Wendoline Acuña y el jefe de la Brigada de Homicidios, Jair Bravo, confirmaron que los cuerpos pertenecían a una mujer y su madre de nacionalidad venezolana, de aproximadamente 70 y 40 años.
La investigación continúa a la espera de las autopsias para esclarecer las causas de la muerte, sin que hasta el momento se haya determinado.
