El senador ahora oficialmente en carrera presidencial señaló que “somos un pueblo orgulloso de nuestra historia, Chile se sobrepone a momentos críticos y difíciles, se levanta una y otra vez de la adversidad”.

Frente a dos mil asistentes en la cúpula del Parque O’Higgins, el ahora candidato presidencial Alejandro Guillier, proclamado este sábado por el Partido Radical, agradeció el apoyo “transversal”, habló sobre sus proyecto y encaró las críticas por su carrera por llegar al sillón de La Moneda.

“Hay esperanza, en los jóvenes radicales está el futuro”, indicó el senador y periodista cuando subió al escenario, luego de las palabras del presidente de la tienda Radical, Ernesto Velasco.

Guillier continuó diciendo que “somos un pueblo orgulloso de nuestra historia, Chile se sobrepone a momentos críticos y difíciles, se levanta una y otra vez de la adversidad”.

Además, entregó una reflexión positiva sin desconocer el actual “clima de desilusión” del país: “Hemos avanzado aún más: Hoy el país es más tolerante y acogedor con los extranjeros. Hemos progresado, somos un país más educado, pero también debemos superar malas prácticas, como los casos de corrupción”.

Por otra parte, Guillier señaló que “no soy enemigo de los partidos”, pero que deben servir de representantes de la ciudadanía, no para perpetuarse en los puestos de poder. Además, expresó que no le gusta que le digan lo que tiene que hacer.

En cuanto a la gestión de Piñera, el ex conductor del noticiaro central de CHV afirmó que fue un “gobierno bursátil”, en referencia a los negocios del ex mandatario. También calificó su paso por La Moneda como “un tiempo perdido” porque no realizó ninguna reforma, ni siquiera en el ámbito de la economía.

Por su parte, de la actual administración del Bachelet, aseveró que “se hizo cargo de las demandas ciudadanas”, aunque “podemos discutir que ha faltado participación ciudadana” o la forma en la que se han realizado las reformas.

En torno a la Araucanía, aseveró que “llegó la hora de saldar deuda histórica con los pueblos originarios de Chile”, y defendió el derecho de esta minoría étnica a tener autonomía y su propias costumbres, cultura, idioma y autoridades.

Gullier también se refirió a las críticas que ha recibido por su falta de programa político y aseguró que “escuchar a la gente no es populismo”.

En ese sentido, criticó la escasa conexión entre la clase política y la gente, afirmando que “el hombre común quiere participar en la toma de decisiones y quiere sentirse parte de las transformaciones, por lo tanto, que nadie se confunda: escuchar a la gente no es populismo, es democracia”.