Autoridades de Gobierno, como el subsecretario el Interior Juan Francisco Galli y la subsecretaria de la Niñez Carol Bown, han salido a criticar el video musical de la campaña lanzada por la Defensoría de la Niñez.

La institución encabezada por la defensora Patricia Muñoz estrenó el lunes un video musical en el marco de la Campaña de Derechos 2020 titulado “El llamado de la naturaleza”. La polémica está porque parte de la letra dice “saltarse todos los torniquetes” y “junto a la revolución”.

Galli señaló que “particularmente en esta época, cuando hemos visto altos niveles de polarización y división en nuestro país, todas las instituciones públicas, pero particularmente aquellas dedicas a la protección de los niños, niñas y adolescentes, deben contribuir a no generar más división, sino todo lo contrario, ojalá generar unión, generar que esa generación que viene vea la sociedad con esperanza, vea la sociedad con una actitud positiva y no generar sociedad división en la sociedad”.

Agregó que “por cómo ha sido entendido el mensaje de esta campaña de la Defensoría de la Niñez, a nosotros nos parece que hubiera sido mejor un mensaje de unión y más positivo hacia la sociedad”.

A su vez, Bown sostuvo el lunes que “queremos manifestar nuestra preocupación. Más que saltarse torniquetes la invitación debiese ser a participar e involucrarse y a construir juntos el país que soñamos. La violencia no es el medio para exigir el respeto de los derechos”.

“Creemos en la participación de niños, en la libertad de expresión, en que deben ser escuchados e incidir en las materias de Chile, pero en un ambiente seguro y adecuado, sin poner en riesgo su integridad física y psíquica. El llamado de la naturaleza no puede ser incitar la violencia”, añadió.

A raíz de esta polémica, la Defensoría de la Niñez respondió que “escogimos lanzar la campaña con una canción y, como tal, ésta utiliza recursos propios del género, como son las metáforas. ‘Saltarse los torniquetes’ es una de esas metáforas, que llama a traspasar todos los obstáculos que la infancia y la adolescencia viven Chile”.

“La canción busca relevar la participación efectiva e incidente que niñas, niños y adolescentes deben tener para terminar con su invisibilización en todas las materias que les afectan, incluyendo el proceso constituyente”, afirmó.

Informó también que el video tuvo un costo de 7 millones de pesos, aproximadamente.