Yulia Naválnaya fue catalogada como extremista y terrorista por autoridades rusas, según lo anunciado en el sitio web del supervisor financiero Rosfinmonitoring.
Su esposo, el líder opositor ruso Alexéi Navalni, murió en prisión bajo circunstancias sospechosas en febrero pasado.
El Tribunal Basmanni de Moscú dictaminó arrestar en ausencia a Naválnaya, quien actualmente vive en el extranjero, por su participación en una organización considerada extremista, emitiendo una orden de búsqueda y captura contra ella. Naválnaya comentó sarcásticamente en un mensaje en X que la decisión judicial se tomó apresuradamente, sin seguir los procedimientos estándares, como iniciar un caso penal antes de decidir sobre el arresto.
Prometiendo continuar la lucha de su marido desde el exilio, Naválnaya acusó al presidente ruso Vladímir Putin de ser responsable de la muerte de Navalni, diciendo que su régimen se sostiene en “la desinformación, la mentira, el engaño y las provocaciones”.
“Su lugar está en prisión“, declaró en su comunicado del martes.
Navalny falleció de manera abrupta el 16 de febrero, poco antes de las elecciones presidenciales del 17 de marzo, en las cuales Putin era el favorito.
Según reportes, su muerte ocurrió después de un paseo en la prisión IK-3 en Jarp, una localidad del distrito autónomo Yamalo-Nénets. La oposición rusa sostiene que el Kremlin está detrás de su muerte, aunque Putin insiste en que fue un deceso natural.
