El subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana, junto a la subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli, y la rectora de la universidad de Chile, Rosa Devés, presentaron este miércoles el trabajo intersectorial que han desarrollado para elaborar la Estrategia en Salud Mental en Educación Superior.
El trabajo articulado comenzó en 2022 con la conformación de una mesa técnica entre ambos ministerios, que diseñó un primer diagnóstico respecto al estado del sistema de educación superior en materia de salud mental. Para ello, fueron aplicados dos instrumentos de catastro para identificar el soporte institucional que los distintos establecimientos tienen en esta materia, en septiembre de 2022 y en marzo de 2023.
Dentro de los datos recopilados en las instituciones de educación superior que participaron de la etapa diagnóstica, se advierte que las consultas por salud mental en las instituciones de educación superior crecieron 22,2 puntos porcentuales entre los años 2018 (55,7%) y 2022 (77,9%). Además, el 50% de estas instituciones no cuenta con convenios para la derivación de estudiantes con problemas relacionados a esa área. No obstante, la mitad de las entidades educacionales declara sí contar con estrategias de apoyo o reintegro de estudiantes que desertan o suspenden sus estudios por causas de salud menta.
Bajo ese contexto es que se anunció la conformación de un Consejo Asesor en Salud Mental, cuya tarea será la elaboración de una propuesta de plan de acción para la promoción y prevención en salud mental en la educación superior, y así dar una respuesta institucional a esta problemática.
El Consejo está compuesto por la Subsecretaría de Educación Superior, a través de las divisiones de Educación Universitaria y Técnico Profesional; el Departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud; representantes estudiantiles de las organizaciones participantes; la Red de Divisiones de Asuntos Estudiantiles de las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores (CRUCH); las Vicerrectorías Académicas del sistema universitario y técnico profesional; expertos en materia de salud mental; representantes de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA); y representantes de las Unidades de Salud Mental de las instituciones de educación superior.
Para el subsecretario Orellana esta es una instancia única de participación donde las y los estudiantes pueden encontrar apoyo desde diferentes entidades para enfrentar posibles problemas, agregando que “las recomendaciones que emanen de este Consejo Asesor, donde estarán presentes distintos estamentos, las vamos a transformar en cambios normativos y cambios estructurales para el sistema de educación superior.” Agregó también que, “como Subsecretaría, nos resulta fundamental avanzar en esta materia desde un enfoque formativo que ponga al centro la formación de personas e incorpore nuevas formas de aprender y enseñar, permitiendo que los y las estudiantes desarrollen todas sus capacidades y prioricen su bienestar”.
La subsecretaria Albagli señaló que “el programa de Gobierno del Presidente Gabriel Boric estableció a la salud mental como una prioridad. Un ejemplo de esto es el plan Construyendo Salud Mental. Este plan reconoce la importancia de fortalecer la salud mental en las comunidades educativas. Por eso estamos desarrollando distintas acciones junto a Mineduc, como el trabajo anunciado hoy, que pone acento en la educación superior, pues sabemos que para muchas y muchos este es un período que coincide con distintos estresores que pueden derivar en problemas de salud mental, como las demandas de mayor autonomía, el asumir responsabilidades académicas y el cumplimiento de las expectativas personales y familiares de esta etapa de la vida”.
La rectora Devés enfatizó en la importancia de considerar la voz de las y los principales implicados en la elaboración de esta nueva política. “Los y las estudiantes tienen una fuerza muy grande para movilizarnos. Ellos y ellas deben ser protagonistas”, expresó. Luego agregó que “mostramos hoy que las instituciones, junto con los ministerios de Educación y de Salud, estamos trabajando articuladamente y esto es un ejemplo para otras políticas públicas”.
Por su parte, Sabina Orellana, vocera de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), señaló que “nosotros estamos impulsando que la salud mental sea considerada a través de una política pública por lo menos hace unos 7 años, y antes era un tabú, pero hoy al Gobierno le importa la salud mental y le importa la salud mental en educación superior y eso se agradece”.
La jornada de este miércoles contó además con un panel expertos y expertas de larga trayectoria: Vania Martínez Nahuel, investigadora de la Universidad de Chile; Cristóbal Hernández, investigador de la Universidad Adolfo Ibañez; Belén Vargas, profesional del Departamento de Salud Mental del Ministerio de Salud; María Teresa Ramírez, del equipo del Plan Reactivación Educativa del Ministerio de Educación; e Ivonne Ahlers, directora de Salud Mental de la Universidad de Chile.
Además, las autoridades anunciaron el próximo inicio de los Diálogos Participativos de Salud Mental con Estudiantes de Instituciones de Educación Superior, actividad planificada para el segundo semestre de 2023 con representantes de Universidades, Centros de Formación Técnica e Institutos Profesionales. De cada diálogo se elaborará un documento que complementará la información recolectada.