El Gobierno llamó este lunes a los parlamentarios a aprobar la ley de Migración, que se discute en el Senado, ante un “ingreso irregular masivo” de inmigrantes.

Esta mañana fue el subsecretario de Interior Juan Francisco Galli quien alertó sobre el ingreso clandestino de ciudadanos venezolanos y esta tarde los ministros de Interior, Víctor Pérez, y de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand, hicieron notar sobre los problemas que se suscitan con una inmigración deficientemente regulada.

“La entrada de personas de manera ilegal e ilegítima hace necesario que inmediatamente los tengamos que llevar a estas residencias sanitarias. Ese es solo un dato de las dificultades que genera en nuestro país el ingreso ilegal, y teniendo presente que hoy tenemos fronteras cerradas. Es decir, en el momento en que normalicemos la situación, esto puede ser incluso más problemático, más caótico”, señaló Pérez.

El secretario de Estado sostuvo que “se hace absolutamente indispensable tener una ley migratoria que provea al Estado de las herramientas necesarias para combatir el ingreso irregular”, en un claro mensaje hacia los parlamentarios, que aún debaten el proyecto de ley de Migración que envió el Presidente Sebastián Piñera.

“Lo hemos dicho y lo reafirmamos hoy día: Chile y los chilenos aceptamos y queremos al inmigrante que llegue a Chile, pero que lo haga de una manera regular, de una manera ordenada, y cumpliendo todos los requisitos para que pueda integrarse a nuestro país“, añadió.

“Este ingreso irregular masivo hace que no puedan integrarse, significa problemas para las comunas y las regiones, para otros chilenos y para ellos mismos, puesto que no pueden integrarse como es el objetivo de un proceso de migración ordenada”, cerró Pérez.

“VAMOS A FORTALECER EL CONTROL FRONTERIZO”

A su vez, el canciller Allamand planteó que “hemos hecho un análisis de la situación que se está produciendo en la frontera norte (…) La situación es muy distinta de lo que ocurría en el pasado, donde todo el mundo recuerda aviones en los que venían personas supuestamente como turistas, a sabiendas de que no tenían tal carácter”.

Sin embargo, advirtió que “las personas que están ingresando clandestinamente al país están cometiendo un delito, y en consecuencia, lo que correspondería es que hubieran procedimientos expeditos para expulsar a dichas personas del país”.

“Vamos a fortalecer el control sobre las fronteras, vamos a continuar trabajando con las cancillerías de los países vecinos y vamos a ofrecer una cooperación en términos a contribuir a desmantelar las bandas de personas que funcionan como trata de personas o se aprovechan de las personas que pretenden ingresan al país”, finalizó.