El miércoles 19 de julio pasado la Presidenta Michelle Bachelet promulgó la Ley de Tenencia Responsable de Mascotas, que establece medidas de protección, promueve la responsabilidad social de los dueños, y permite controlar los efectos negativos y riesgos del abandono.
La iniciativa, más conocida como ‘Ley Cholito’, también sanciona todo tipo de maltrato con penas que van desde multas de 2 a 30 UTM y sanciones penales que van desde presidio menor a medio.
El senador Girardi, autor de la iniciativa, afirmó que “la ley anterior, ‘De bienestar animal’ establecía sanciones al maltrato pero debido a múltiples presiones se excluyó al rodeo. Esta nueva ley no lo excluye y por ello, junto a organizaciones animalistas, denunciaremos al Ministerio Público todo tipo de actividades donde haya maltrato animal”.
A juicio del parlamentario “el rodeo no es un evento deportivo, es una actividad donde a un ser vivo, joven e indefenso, se le obliga a correr con picanas eléctricas o afiladas, se le persigue y se le aprisiona de manera brutal contra el tablado provocándole desgarros o fractura a las costillas. Y si se cae al suelo le retuercen la cola para que se levante”.
El congresista calificó todas esas situaciones como “actos de tortura que transgreden artículos específicos (291 bis) de la nueva ley” y por ello anunció que harán “uso de todos los instrumentos legales que permitan civilizar y hacer más humana nuestra sociedad. Es algo sicopático disfrutar del sufrimiento ajeno”.
Consultado por los argumentos de quienes defienden la actividad como “una tradición familiar”, el senador dijo que “no todas las tradiciones son buenas, el circo romano también lo era y se terminó por abominable; los mayas sacrificaban niños; las corridas de toros también lo eran y Barcelona las prohibió porque hubo conciencia que no puede haber esparcimiento maltratando a un ser vivo”.
Y agregó que “el siglo XXI ya no es tiempo para que nuestros hijos crezcan con un modelo de convivencia donde lesionar a un ser vivo indefenso sea algo entretenido y divertido. Esa no es la sociedad que queremos construir, porque quien no respeta a los animales tampoco va a respetar a un ser humano”.
El parlamentario felicitó a todos los alcaldes que “tuvieron el coraje” para optar por no realizar rodeos durante las próximas Fiestas Patrias, “en especial a al alcalde (Joaquín) Lavín, con quien pensamos de manera muy diferente, pero cuya decisión habla de una persona humanitaria que respeta la vida ajena y que tiene un nivel de civilización y espesor cultural mayor”.