La investigación de Ciper reveló cómo el entonces general director de Carabineros usó gastos reservados de la institución para la adquisición de un software que le permitiera hackear a los mapuches investigados por incendios y demostrar su presunta culpabilidad.
Introducir métodos hacker para penetrar las comunicaciones de grupos mapuches, con la contratación de un asesor informático como Alex Smith, fue la idea que tuvo e implementó el
exgeneral director de Carabineros, Bruno Villalobos,
para mostrar resultados en las pesquisas que realizaba la institución para dar con los responsables de incendios en La Araucanía.
Según devela in extenso el reportaje a fondo del Centro de Investigación Periodística (Ciper), el reconocido montaje
“Operación Huracán” fue creado con ese objetivo por la entonces máxima autoridad de la institución, la que además buscaba permanecer en su cargo una vez realizado el cambio de mando presidencial en 2018.
Conforme indica el artículo
una serie de mensajes demuestran el paso a paso de cómo Villalobos ideó la farsa en 2017 en una reunión con los jefes de la Unidad de Inteligencia Operativa Especializada (UIOE), el coronel Marcelo Teuber y el mayor Patricio Marín.
Fue allí que se decidió introducir métodos hacker para penetrar las comunicaciones de grupos mapuches, con la contratación de un asesor informático que fue Álex Smith, quien se incorporó a la Oficina de Análisis de la UIOE, liderada por el capitán Leonardo Osses.
Así,
en abril de ese año se realizaron diversos encargos a Smith,
la mayoría de ellos relacionados a noticias falsas sobre la familia Bachelet, como la presunta detención de la hija de la exgobernante en Argentina por drogas, donde el “experto” apuntó al diario La Segunda y la UDI.
COMPRA DE OXYGEN
Más adelante en agosto de 2017,
Smith entregó una serie de conversaciones falsas en las que 10 dirigentes mapuche, como Héctor Llaitul y los hermanos Huenchullán, asumen la autoría de atentados incendiarios contra camiones forestales.
Con esta información elaborada por la unidad encargada de Operación Huracán, Bruno Villalobos entregara estos antecedentes a Fiscalía respecto de los mensajes captados. “El tema de cómo acceder a los equipos celulares de los blancos (dirigentes mapuche) lo tengo resuelto. No se preocupe”, le señaló Marín.
Dicha
solución del oficial a cargo fue comprar el software Oxygen, que sirve para acceder a información de celulares, cuyo costo fue de
$21 millones que fueron pagados en efectivo con dinero proveniente de los gastos reservados de la institución, transacción que fue ocultada a Contraloría.
El reportaje también plasma el testimonio ante la fiscalía del dueño de Xmart Lab, Gonzalo Paredes, quien afirmó que Marín llegó “con el dinero en efectivo equivalente al monto cotizado, con el objeto de adquirir el producto seleccionado”.
“
Recuerdo que al momento de pagar el producto el mayor Marín extrajo desde una maleta un sobre plástico sellado con el nombre del Banco Central, que contenía billetes con una nominación de 20 mil. Al abrirlo se contabilizó la suma de 20 millones. Luego extrajo distintos fardos de billetes de 10 mil y pagó la diferencia”.
Luego de esa transacción, entre el 6 y el 11 de septiembre, un ejecutivo de la empresa le explicó vía correo electrónico a Smith cómo utilizar el software y le recomendó complementar su uso con el programa Kingo Root.
En los celulares de los detenidos en la Operación Huracán quedó la huella de cómo los carabineros buscaron en internet alguna manera de descargar Kingo Root, rompiendo con las normas de pericias de aparatos telefónicos.
De acuerdo a los mismos mensajes, Villalobos y Marín se reunieron el sábado 16 de septiembre en la tienda Paris del Mall Alto Las Condes, donde trataron el
informe firmado por el general Gonzalo Blu y que sería entregado a Fiscalía.
Conforme al artículo de Ciper este
documento fue corregido por el equipo de la Fiscalía de Temuco, encabezado por Luis Arroyo, acción que va cintra la normativa y procedimientos ya que los
informes de inteligencia solamente pueden ser revisados por los fiscales después de su liberación por parte de la policía.
Recién el 23 de septiembre
el organismo persecutor lo aprueba, y se lleva a cabo el operativo que termina con la detención de ocho de los 10 investigados,
acompañado de la entrega a medios de comunicación de los supuestos mensajes.
Estas conversaciones no fueron cuestionadas hasta la segunda quincena de enero, cuando el fiscal Arroyo denunció que los chats captados por “Antorcha” eran falsos, desestimando la “Operación Andes”, sobre un supuesto tráfico de armas desde Argentina.
Blu, Marín, Osses y Smith serán reformalizados el próximo 25 de abril, aunque no se descarta que el fiscal Carlos Palma pida una extensión en el plazo de la investigación, mientras que hasta el momento no se ha solicitado la formalización de Villalobos.