El entrenador de la selección chilena, Ricardo Gareca, lamentó la amarga derrota por 2-1 que sufrió La Roja ante Brasil, pero aseguró que mantiene la fe de poder revertir el complejo momento que atraviesa el combinado nacional para clasificar al Mundial del 2026. 

Una vez terminado el partido en el Estadio Nacional, el “Tigre” analizó el encuentro en conferencia de prensa, y si bien exhibió su amargura por la agónica caída, destacó el alza futbolística que experimentó el equipo.

“Las derrotas siempre duelen, hay un análisis profundo y las fechas pasan, nos obliga a exigirnos más a sumar de a tres. Al pasar las fechas se comprime todo. Me gustó la actitud del equipo, quedamos conformes con el trabajo que tuvieron, como se brindaron, con la multitud que vino con el estadio lleno, empujó y estimuló al equipo”, señaló de entrada el DT.

Sobre la reacción del plantel tras el resultado, el argentino remarcó que “el dolor es ahora, durará lo que tenga que durar y rápidamente uno tiene que cambiar el estado de ánimo, preparar el próximo partido y seguir adelante. Les dije que quedamos satisfechos con lo que se vio en el campo de juego, creo que podemos mejorar mucho más”. 

Pensando en el duelo del próximo martes con Colombia, el estratega expresó que “tenemos que tratar de ir a Barranquilla a sacar un buen resultado. Si mantenemos esto lo podemos lograr, independiente del nivel que muestra Colombia en estos momentos. Conociendo a los muchachos, creo que todo es posible”. 

Pese a que el camino al Mundial de 2026 está cuesta arriba, Gareca fue enfático en mencionar que “tengo fe. Creo que Chile me encantaría que siga un proceso, pero no está a mi alcance, creo en los muchachos, tengo confianza en el jugador chileno y a partir de allí me muestra que podemos tener mejores actuaciones”. 

“Ahora si soy el indicado (para el proceso), creo que nos toca a nosotros este momento y es necesario que la gente pueda ver otras alternativas. No sé si yo perduraré en el proceso, las ganas las tengo, pero no podría dar una respuesta, dada la demanda y la exigencia permanente que hay de resultados. Tengo fuerzas, soy capaz de aguantar, estoy preparado para esto. Pero más allá de eso, hay cosas que no puedo resolver”, añadió el trasandino, sembrando dudas sobre su futuro si sigue sin conseguir buenos resultados. 

De igual forma, subrayó que “quedan muchos puntos, necesitamos una buena racha e hilvanar triunfos. Todavía queda margen. De ninguna manera me bajo de la posibilidad del Mundial. Perder nos aleja, soy consciente, pero mientras los números me dan, tengo fe y confianza. No cambio el discurso”.