Hernán Larraín sostuvo que tiene toda la intensión de “subsanar las heridas del pasado”, asegurando que se haga justicia en los casos, toda vez que corresponda.
El designado ministro de Justicia y DD.HH., Hernán Larraín (UDI), confirmó la continuidad del penal de Punta Peuco, lo que provocó las críticas de organizaciones de derechos humanos, especialmente por parte de familiares de víctimas de la dictadura. “El Presidente lo ha planteado desde hace mucho rato, Punta Peuco es una cárcel que debe continuar en las funciones que desarrolla en la actualidad”, señaló Larraín, según dio a conocer La Tercera. También manifestó su intención de plantear una nueva agenda de DD.HH., con el propósito de colaborar en “tratar de subsanar las heridas del pasado, buscando la reconciliación y asegurando que se haga justicia en los casos, toda vez que corresponda”. Alicia Lira, presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, calificó como “inaceptable” el anuncio. “Para nosotros es uno de los civiles que ha mantenido la impunidad a lo largo de todos estos años. Nos violenta, porque fue del grupo de amigos personales de Paul Schäfer. Él lo defendió, es imposible que no tenga información sobre los detenidos en Colonia Dignidad”, declaró al mismo medio. A su vez, el abogado Raúl Meza, defensor de uniformados presos en Punta Peuco, destacó la designación y decisión de mantener el penal. Sin embargo, advirtió la existencia de “matices” con Larraín. “Tenemos diferencias importantes sobre la visión del pasado. Él habla de dictadura, nosotros de gobierno militar (…) puede haber voces disonantes sobre su designación, pero tenemos, como familia militar en retiro, grandes expectativas en su gestión ministerial”, señaló Meza.