Ayer miércoles se conoció que al joven chileno-palestino, Omar Salamé (24), se le prohibió la entrada a la ciudad de Beit Jala, Cisjordania, área que actualmente es administrada de manera parcial por fuerzas militares israelitas.
El caso de Salamé se convierte en el segundo de un chileno deportado por Israel en menos de tres meses, ya que en abril pasado al abogado y Director Ejecutivo de la Federación Palestina de Chile, Anuar Majluf, se le prohibió ingresar a Israel.
La Nación se contactó con la Federación Palestina de Chile quienes emitieron una declaración oficial respecto a esta noticia.
“Exigimos al Gobierno de Chile que, de una vez por todas, otorgue la necesaria protección a sus ciudadanos y represente en forma enérgica su protesta ante el Estado de Israel llamando a su embajadora (Mónica Jiménez) a consulta, manifestando que no continuará permitiendo este tipo de trato a sus ciudadanos por parte de las autoridades fronterizas de ese país”.
“Culpamos directamente al Gobierno de Chile por la ocurrencia de este episodio, ya que en ocasiones anteriores, la última de ellas hace menos de 60 días, cuando fuera deportado nuestro Director Ejecutivo, se le representó esta misma solicitud. Los resultados de su gestión al respecto, si es que la hizo, están a la vista”, señalaron desde la Federación.
Desde la Federación Palestina de Chile, señalaron que el joven Salamé fue “sometido a más de 18 horas de interrogatorios y tortura psicológica por parte de los funcionarios israelíes“.
Sobre esto, la vocera de la Comunidad Palestina de Chile, Nadia Garib, señaló que “es inaceptable la frecuencia de este tipo de humillaciones y maltratos, no podemos permitir que Israel siga deportando a chilenos con total impunidad y sin ningún tipo de consecuencia en las relaciones bilaterales entre ambos países. Por lo mismo, como Comunidad Palestina de Chile exigimos acciones concretas de nuestra Cancillería y que se llame a consulta a la embajadora en Tel Aviv lo antes posible”, indicó Garib.
El caso de Salamé se convierte en el segundo de un chileno deportado por Israel en menos de tres meses, ya que en abril pasado al abogado y Director Ejecutivo de la Federación Palestina de Chile, Anuar Majluf, se le prohibió ingresar a Israel.
Las fronteras de Beit Jala son custodiadas por militares israelíes quienes deciden los accesos / FOTO AFP / ABBAS MOMANI
“Exigimos al Gobierno de Chile que, de una vez por todas, otorgue la necesaria protección a sus ciudadanos y represente en forma enérgica su protesta ante el Estado de Israel llamando a su embajadora (Mónica Jiménez) a consulta, manifestando que no continuará permitiendo este tipo de trato a sus ciudadanos por parte de las autoridades fronterizas de ese país”.
“Culpamos directamente al Gobierno de Chile por la ocurrencia de este episodio, ya que en ocasiones anteriores, la última de ellas hace menos de 60 días, cuando fuera deportado nuestro Director Ejecutivo, se le representó esta misma solicitud. Los resultados de su gestión al respecto, si es que la hizo, están a la vista”, señalaron desde la Federación.
Desde la Federación Palestina de Chile, señalaron que el joven Salamé fue “sometido a más de 18 horas de interrogatorios y tortura psicológica por parte de los funcionarios israelíes“.
Sobre esto, la vocera de la Comunidad Palestina de Chile, Nadia Garib, señaló que “es inaceptable la frecuencia de este tipo de humillaciones y maltratos, no podemos permitir que Israel siga deportando a chilenos con total impunidad y sin ningún tipo de consecuencia en las relaciones bilaterales entre ambos países. Por lo mismo, como Comunidad Palestina de Chile exigimos acciones concretas de nuestra Cancillería y que se llame a consulta a la embajadora en Tel Aviv lo antes posible”, indicó Garib.
