“Han pasado dos gobiernos. Uno con un proyecto que no tuvo viabilidad en el Congreso y otro que no tuvo voluntad política dentro del Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet. Y llegamos al punto en que estamos hoy. Por tanto, yo creo que hoy día es el tiempo de avanzar”, comentó el presidente de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, Juan Luis Castro.
No obstante, para los expertos que participaron en el coloquio “Reforma al Sistema Isapres”, organizado por el Instituto de Políticas Públicas en Salud de la U. San Sebastián, la reforma que hay que hacer no sólo involucra al sistema asegurador privado, sino también al público, Fonasa, y eso no se puede hacer de una sola vez, sino por etapas.
“Esta reforma debiera hacerse en tres etapas y en tres gobiernos distintos. En la primera etapa partir con la reforma a la Ley de Isapre y, en paralelo, iniciar una reforma paulatina de Fonasa a fin de mejorar su competitividad. Todo esto el segundo semestre de este año. Respecto a los demás cambios de integración, de un fondo de compensación entre Fonasa e isapres quedarán para una segunda o tercera etapa, porque es imposible hacer esa reforma hoy día con la cantidad de desafíos que tenemos como país”, puntualizó el decano de Medicina y Ciencia de la U. San Sebastián, Manuel Inostroza.
LAS PIEDRAS DE TOPE
A su vez, el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic indicó que “existe consenso social, político y técnico para resolver la cautividad, las preexistencias y los problemas de transparencia y los instrumentos para resolverlos también están más o menos claros: mecanismo de compensación de riesgo, en torno a un plan único, pero ahí surgen las diferencias. Yo soy partidario de aumentar la cotización individual en la medida que esto vaya asociado a relevar la carga financiera a las familias. Por ejemplo, entregarle a los seguros la responsabilidad de financiar los medicamentos a sus beneficiarios”.Sobre este mismo punto, el gerente general de Isapre Consalud, Marcelo Dutilh, afirmó que el tema se entrampó porque en la discusión “se dejó de poner el foco en el problema de salud de los 17 millones de chilenos y la mirada se enfrascó en si tener un sistema único de salud o uno con multiseguros, y yo creo que ese no es el problema de fondo”.